(PL)
El gobierno chipriota descartó nuevos recortes adicionales en los ahorros bancarios, salvo aquellos contemplados dentro del programa de reestructuración del sistema financiero acordado con sus acreedores internacionales.
Así lo aseguró en un comunicado el ministro de Finanzas, Jaris Yeoryiadis, luego propagarse en el país informaciones según las cuales se aplicarían recortes a los depósitos superiores a los 100 mil euros de hasta el 60 por ciento.
Categóricamente no existe tal intención, expresó Yeoryiadis, quien señaló que lo pactado con la Comisión Europea, Fondo Monetario Internacional y Banco Central Europeo no incluye ninguna medida adicional.
Nicosia logró un acuerdo in extremis para desbloquear una asistencia de hasta 10 mil millones de euros, aunque como contraprestación deberá aplicar una severa reforma financiera.
El "salvamento" comprende la liquidación de la entidad financiera Laiki y la reestructuración del Banco de Chipre.
En ese proceso, el Laiki será convertido en un "Bad Bank" (banco malo), en el cual se colocarán los denominados activos tóxicos, es decir, los fondos de inversión de muy baja calidad que se crean a partir de hipotecas a personas con solvencia económica baja.
Los activos bancarios que están garantizados se ubicarán en el Banco de Chipre, mientras a los pequeños ahorradores, con menos de 100 mil euros en sus cuentas, no se les vinculará a la aportación forzosa de financiamiento.
En cambio, los depósitos superiores a 100 mil euros tendrán que asumir píérdidas, que servirán para pagar las deudas y recapitalizar la banca.
Una de las primeras consecuencias por tales medidas será el despido de todos los trabajadores del Laiki y de una parte de los del Banco de Chipre.