Nuevo varapalo sobre el ajuste español. La agencia de medición de riesgos Moody's cree que España no será capaz de situar su díéficit público en el 4,5% del producto interior bruto (PIB) este año sino que lo reducirá sólo hasta el 6% del PIB, una bajada que no obstante permitirá ralentizar el ritmo de crecimiento de la deuda pública.
En un informe publicado hoy, Moody's reconoce que la consolidación fiscal emprendida por España obtuvo en 2012 buenos resultados, sobre todo si se compara con el año anterior, ya que la reducción del díéficit se consiguió en todos los ámbitos, con excepción de la Seguridad Social.
La agencia valora los esfuerzos realizados por España en un contexto de contracción de la economía, y ha supuesto un paso adelante para situar las finanzas públicas en la senda correcta.
Pero, al mismo tiempo, advierte de las continuas desviaciones de los objetivos de díéficit y de las incesantes revisiones de íéstos, algo que debilita la credibilidad del Gobierno español en lo que a finanzas públicas se refiere. í‰sta es una de las razones por las que Moody's mantiene sin cambios en Baa3 con perspectiva negativa la calificación de España.
El Ejecutivo español está intentado flexibilizar con Bruselas el objetivo de díéficit para este año hasta precisamente un 6% del PIB. La Comisión Europea negó la semana pasada estar negociando con España esta relajación, aunque admitió que podría hacerlo si se confirma que España cumplió con el ajuste estructural exigido en 2012.
