¿Dónde está el límite? No es un reclamo para vender bebidas energíéticas o ropa deportiva. Es la pregunta que inversores y analistas se hacen a la hora de referirse a OHL, uno de los valores que mejor comportamiento ha tenido en la bolsa española en los últimos años. Tras haber cerrado 2012 con un repunte de casi el 13%, la compañía no ha dado síntomas de flaqueza a la hora de mantener su senda alcista, iniciada a mediados de 2012. Durante este ejercicio la firma se anota casi un 17%, es el tercer mejor valor del selectivo español y en las últimas semanas no deja de recibir recomendaciones de compra mientras el consenso de mercado recogido por Bloomberg le da un potencial superior al 15%.
Algo ha cambiado en las entrañas de OHL. La compañía, tradicional emblema del sector de la construcción, ha ido adquiriendo paulatinamente la estructura de un holding más diversificado con un perfil de riesgo más defensivo. El momento clave de esta metamorfosis fue su mayor penetración en el capital de Abertis a cambio de la venta de buena parte de sus negocios en Latinoamíérica. Hoy, con una participación del 18,93%, la firma presidida por Juan Miguel Villar Mir sigue apostando por la empresa de infraestructuras y sólo el pasado mes de marzo realizó inversiones que superaron los 60 millones de euros.
Los analistas coinciden al apuntar que Abertis le ha dado equilibrio a OHL a la hora de aportarle fondos recurrentes con el pago de dividendos. A finales de marzo, la constructora cobró 50,8 millones en concepto de retribuciones, una cuantía que, según apuntan los expertos, le ha permitido poder equilibrar su calendario de vencimientos de deuda. Este año tendrá que hacer frente al pago de 120 millones, que aumentan hasta 481 millones en 2014 y a 960 millones para 2015. En total, unas deudas para los próximos tres años que superan los 1.500 millones de euros mientras se mantiene el objetivo de reducir su carga financiera a una proporción de dos a tres veces sobre ebitda (beneficio bruto de explotación).
“Es normal que una compañía de sus características arrastre más deuda que otras firmas del Ibex, pero más allá de este aspecto es, sin duda, uno de los valores más interesantes de la bolsa españolaâ€, apunta Virginia Píérez, analista de Tressis. La experta fundamenta el potencial de la compañía en “unos buenos resultados operativos†(presentó un beneficio ríécord de 1.005 millones de euros) reportados, principalmente, por las plusvalías obtenidas por la venta de sus autopistas en Brasil y Chile a Abertis.
Desde Renta 4, Nuria ílvarez destaca otros tres puntos fundamentales: el incremento de su dividendo (OHL ha anunciado que lo elevará en un 16,4% respecto al que abonó en 2012); una posible mejora del rating de la compañía desde bono basura (Moody’s la sitúa en BA2 y Fitch en BB-) a grado de inversión, que distingue a los emisores de deuda más importantes y la “fantástica política de internacionalizaciónâ€, a la vista de los contratos que ha ido consiguiendo en los últimos meses a lo largo de todo el mundo.
“En Chile mantiene sus planes de instalación de equipos industriales en minas, ha firmado un acuerdo en India (algo que no es nada fácil sin un socio local) para desarrollar infraestructuras, está instalando una línea ferroviaria que recorre los Urales en Rusia, construye los túneles que atraviesan el mar de Mármara en Turquía, una red de hospitales en Canadá… y las previsiones estiman que seguirá cerrando acuerdos en todo el mundo a lo largo del próximo añoâ€, añade ílvarez.
En opinión de los expertos, la cotización todavía no está reflejando buena parte de estos aspectos. Reflejo de ello son las recomendaciones que ha recibido el valor en las últimas semanas por parte de los analistas. En concreto, desde el pasado 25 de marzo, el valor ha recibido ocho recomendaciones de compra, de las que seis sitúan su precio objetivo a doce meses vista por encima del nivel de los 30 euros por acción.
Entre estas estimaciones destacan las de Banco Santander, que sitúa a las acciones en 32 euros; Interdin y Espirito Santo (por encima de 33) o Banesto Bolsa, que recomienda comprar, pero no aprecia apenas potencial respecto a los niveles actuales. De cumplirse estas perspectivas, el valor volvería a situarse en su mayor precio desde mediados de 2007.
La guinda está en Míéxico
Uno de los principales valores de la compañía está siendo la filial mexicana que todavía mantiene. A la vista de que el negocio español está congelado en todo el sector, la actividad al otro lado del Atlántico cobra más fuerza que nunca. En el caso de la presencia en el país azteca, desde Renta 4 consideran que su peso dentro de la cotización de la compañía tambiíén está infravalorado.
“Es un negocio financieramente independiente y está dando buenos frutos a la matriz española. A medida que se va implantando el modelo mexicano, los beneficios para OHL se multiplican exponencialmente y suponen una vía de diversificar oportunidades de negocioâ€, señala Nuria ílvarez. En las últimas 52 semanas, los títulos de OHL Míéxico acumulan una subida de más de un 80%