FCC quiere dar señales a los acreedores de que va a cumplir su exigente plan estratíégico, con el que quiere recuperar la senda de los beneficios. La empresa dirigida por Juan Bíéjar ultima la venta de Proactiva, su filial latinoamericana de servicios, a Veolia, al tiempo que ha puesto en el mercado el 50% de Eumex, su subsidiaria de equipamientos urbanos en Míéxico.
Según aseguran fuentes financieras, FCC y Veolia tienen muy avanzado un acuerdo para que el grupo francíés adquiera a la empresa española el 50% de Proactiva. Ambas sociedades tienen un acuerdo parasocial que les otorga un derecho preferente de compra en el caso de que cualquiera de ellos quisiera desprenderse de su participación del 50%.
El cierre de los detalles de la operación lo están llevando a cabo Sociíétíé Gíéníérale, asesor de Veolia, y BBVA, uno de los principales acreedores y la entidad que fiscaliza todas las transacciones corporativas de FCC para reducir su abultada deuda. Proactiva es uno de los mayores grupos de gestión de residuos urbanos y del ciclo integral del agua en Iberoamíérica y está presente en los países más importantes de la región, como Brasil, Chile, Míéxico, Perú y Colombia.
Fuentes oficiales de FCC han descartado hacer cualquier comentario sobre esta desinversión, aunque todo apunta a que este mes anunciarán alguna transacción para cumplir con el plan estratíégico anunciado el 21 de marzo. El grupo podría dar alguna pista mañana, ya que Bíéjar presentará los resultados del primer trimestre del año.
A cierre de 2012, Proactiva obtuvo unos ingresos de 538,4 millones de euros, lo que supuso un crecimiento interanual del 14,5%. La sociedad alcanzó un resultado bruto de explotación de 104,8 millones de euros, lo que representa un margen sobre ventas del 19,5%. Su deuda financiera neta total a 31 de diciembre ascendía a 107,8 millones de euros. Con estos datos, fuentes financieras señalan que la compañía podría alcanzar una valoración de entre 400 y 500 millones, por lo que FCC ingresaría entre 200 y 300. Otras fuentes consideran que esta tasación puede ser demasiado optimista.
La desinversión de Proactiva forma parte de la nueva estrategia de FCC, que desde ahora se quiere centrar en las actividades de ingeniería y ejecución de grandes proyectos de infraestructuras, la gestión y el tratamiento de residuos urbanos y el negocio global del agua. Por tanto, se desprenderá de todo aquello que no se califique como core.
Plan agresivo
Con estas ventas, que oscilarán entre los 2.400 y los 2.600 millones de euros, FCC pretende reducir su deuda hasta los 5.300 millones desde cerca de los 8.000 actuales. Entre los activos a vender tambiíén se encuentra Eumex, la empresa de equipamientos urbanos que gestiona la publicidad exterior de las principales ciudades de Míéxico. FCC posee un 50% de esa sociedad, pero no la gestiona ya que las relaciones con su socio, Antonio Torres, son malas.
Torres es un empresario español que fue detenido en hasta cuatro ocasiones por el gobernador de la Míéxico Distrito Federal, Andríés Manuel López Obrador, entre 2005 y 2006. A diferencia de Proactiva, donde la afinidad con Veolia viene de lejos, lo que facilita la trasmisión de su participación, en Eumex las posturas están más alejadas.
Junto a estas dos operaciones, FCC quiere colocar su participación en Globalvía, su holding de infraestructuras, el 100% de su negocio de energía renovable, en el que invirtió cerca de 1.000 millones, y el paquete que todavía le queda en Realia. En los últimos años, el grupo ya se deshizo de sus actividades de aparcamientos y de servicios aeroportuarios.