(El País)
La Cámara baja irlandesa, el Dáil, empezó ayer a debatir la inesperada propuesta del taoiseach (primer ministro), Enda Kenny, de convocar un referíéndum en octubre para que los irlandeses se pronuncien sobre la abolición o no del Senado.
El gobierno justifica la propuesta argumentando que el Senado ha perdido la utilidad que podía tener hace casi un siglo y que muchos países pequeños lo han suprimido.
Ahorro para el erario
A su juicio, una segunda cámara tiene sentido en grandes países federales, como EE. UU., pero no en países pequeños como Irlanda.
El argumento del ahorro de dinero público tambiíén cuenta: El país se ahorrará unos 20 millones de euros anuales, según estimaciones