En los últimos cinco años ha disparado su tamaño, su capitalización y sus beneficios
La crisis parece haber puesto octanos adicionales a la gasolina que impulsa a OHL. La compañía concluyó 2012 —el mejor ejercicio de su historia según su presidente, Juan Miguel Villar-Mir— con más de 1.000 millones de beneficios y un incremento anual de los mismos del 350%, y cerró el primer trimestre de 2013 con un beneficio neto atribuible de 68 millones (65% más que el año pasado), pese a registrar una caída de casi un 11% en sus ventas.
En los últimos cinco años, penosos para su sector y para la economía española, OHL ha agrandado su endeudamiento, pero tambiíén su tamaño (su patrimonio neto atribuible, 2.135 millones, creció un 76% en 2012), sus actividades y sus mercados (el negocio exterior le aporta hoy el 71% de las ventas y el 91% del resultado bruto de explotación). A final de marzo contaba con una cartera de obra, mayoritariamente internacional (80% del total), que le garantizaba casi tres años de actividad constructora. Además, la cartera total de proyectos de OHL, que incluye todos sus negocios, se situó en igual fecha en 73.204 millones, con un incremento anual del 37%. Y no ha dejado de crecer.
Hasta hoy, en lo que va de 2013, se ha hecho, entre otras adjudicaciones, con contratos en los metros de Doha (1.100 millones) y Nueva York (262,3 millones), una terminal en el puerto chileno de Valparaíso (270 millones), una carretera en los Andes peruanos (108 millones), obras en el tranvía colombiano de Medellín (70 millones) y con una participación del 25% en el proyecto Canalejas, que promueve su matriz, el Grupo Villar-Mir, para remodelar con un presupuesto de 500 millones el complejo de edificios históricos de esta zona central de Madrid.
Desde 2008, el año del inicio de la actual crisis económica y financiera y de su incorporación al Ibex 35, OHL ha aumentado en más de un 50% su capitalización bursátil. La adquisición de casi un 20% del capital de Abertis (líder mundial en concesiones de infraestructuras de transporte), su salida del negocio medioambiental (vendió Inima por 231 millones en 2011) y su intensa actividad en el negocio concesional internacional han trasformado un grupo empresarial mediano, eminentemente constructor y bastante domíéstico, en una multinacional que opera en 30 países y que figura entre las primeras del mundo en sus distintas actividades.
Los últimos números de OHL, sus cuentas del primer trimestre, han evolucionado en consonancia con su nueva dimensión y con los avatares de la crisis económica. Junto a las luces del fuerte incremento de su beneficio (65%) y de su resultado bruto de explotación (30%), algunas sombras.
“El aspecto más negativo†de estos resultados, positivos en general, es, en opinión de analistas de Bankinter, “el descenso de las ventas, que se debe tanto a la menor actividad en las áreas de negocio de concesiones (se ha reducido en un 13,5%) y construcción (ha caído un 11,5%) como a cambios en el perímetro de consolidación†y el endeudamiento.
La deuda neta total de OHL a 31 de marzo ascendía a 5.575,7 millones de euros, y de esta cantidad 4.224 millones eran deuda sin recurso. Se incrementó desde diciembre de 2012 un 33%, un aumento que responde a unas necesidades de capital circulante en 325 millones (en línea con la estacionalidad del primer trimestre), a ciertos ajustes del resultado de las actividades de explotación y a inversiones por más de 1.100 millones (importe que recoge los 930 millones destinados a la compra de un 8,69% adicional del capital de Abertis).
El incremento del pasivo del grupo se debe, según los analistas de Renta 4, a “un efecto extraordinario y no recurrente†como es la citada compra de acciones de Abertis. “Eliminando el impacto en deuda con recurso de esa inversión, la ratio deuda neta con recurso sobre Ebitda con recurso se sitúa en niveles de 2,7 veces, cumpliendo el objetivo†de OHL “de situarlo por debajo de 3 veces en el conjunto del añoâ€. En 2013, dicen, deberíamos ver un recorte “de la deuda con recurso apoyada por el plan de pago a proveedores, una positiva evolución del capital circulante en el segundo semestre, los dividendos de Abertis y una mejora de los márgenesâ€.
En cuanto a la situación financiera, recuerdan en el grupo, en marzo pasado la filial OHL Concesiones emitió bonos canjeables por acciones de OHL Míéxico a cinco años y por importe de 300 millones, y en abril la matriz OHL registró en el Irish Stock Exchange un programa de papel comercial con el objetivo de poder emitir títulos a corto plazo hasta un importe de 300 millones.
OHL Concesiones ha cancelado anticipadamente, tambiíén en mayo, un críédito de 250 millones a tres años que se le concedió en septiembre de 2011, y que ha supuesto además la cancelación de la garantía de acciones que OHL Concesiones posee de su filial cotizada OHL Míéxico, representativas del 51% de su capital. En su día, OHL Concesiones pidió el príéstamo para pagar a su matriz críéditos entre las dos sociedades.
En estos días, finalmente, OHL Míéxico —de la que OHL controla el 73,9% del capital— está llevando a cabo una oferta pública de acciones y una oferta primaria privada con las que busca colocar títulos representativos de un 13,9% de su capital por un importe de unos 424 millones de euros. Dice que va a destinar estos fondos a promover nuevos proyectos de infraestructuras en Míéxico (163 millones), a financiar planes de inversión de las autopistas que ya gestiona (183 millones) y a cubrir necesidades de caja (77 millones). En virtud de la oferta, OHL Míéxico emitirá 241.154 millones de nuevas acciones con el fin de colocarlas entre inversores de Míéxico, EE UU y otros mercados extranjeros. BBVA Bancomer y UBS actúan como coordinadores globales de la oferta, y el precio de colocación de los títulos se va a fijar el próximo 20 de junio.
El Grupo OHL, que ha aparcado su idea de sacar a Bolsa su filial OHL Concesiones y que anhela recuperar el grado de inversión (lo perdió en marzo de 2009) que otorgan a las emisiones de deuda de mayor solvencia las agencias de calificación, tiene como objetivo para 2013 incrementar el Ebitda y el resultado neto recurrente en más de un 10% y aumentar las ventas en más de un 5%.
Para alcanzar ese objetivo, OHL va a redoblar su apuesta por el negocio de las concesiones y por los mercados de EE UU, Colombia, Chile y Míéxico. En EE UU ha abierto este trimestre dos nuevas sedes, está preclasificada en un consorcio con FCC y Macquarie para un contrato de infraestructuras de 1.500 millones de euros en Florida, y ultima la firma de otro contrato por cerca de 150 millones. En Chile, OHL está preclasificada ya para la construcción de un puente colgante, el mayor de Latinoamíérica, presupuestado en 570 millones de euros.