Si en la sesión del martes los buenos datos macroeconómicos tuvieron un efecto positivo entre unos inversores que parecía ya habían digerido la posibilidad de que la Fed retire parte o la totalidad de los estímulos monetarios, el crecimiento inferior a lo esperado de la economía de Estados Unidos hizo lo propio. La economía estadounidense creció un 1,8% en tasa anualizada en el primer trimestre, por debajo del 2,4% esperado, lo que fue entendido por el mercado como una razón para que la Reserva Federal se replantee el cese de las inyecciones de liquidez.
Animados por ello, los inversores se inclinaron por las compras y el Dow Jones avanzó un 1,02% en la sesión, con lo que rompió en la misma jornada los niveles de los 14.800 y los 14.900, hasta cerrar la sesión en los 14.910 puntos. El S&P 500, por su parte, tambiíén recuperó niveles al anotarse un 0,96% y subir hasta los 1.603 puntos, mientras que el Nasdaq avanzó un 0,85%, hasta los 3.376 puntos.
La deuda estadounidense, despuíés de sufrir siete días consecutivos de castigo, consiguió por fin reducir su nivel y el bono estadounidense a 10 años rebajó su rentabilidad un 2,65%, hasta el 2,54%. La referencia a 5 años, por su parte, relajó un 4,46% su interíés y se mueve en el 1,42%, despuíés de que en la jornada del martes estuviera a punto de llegar al nivel del 1,5%.
Por valores, la mayoría de los treinta componentes del Dow cerraron con avances, liderados por el fabricante aeronáutico Boeing (2,11%), la cadena de tiendas de bricolaje Home Depot (2,06%) o Microsoft (2,02%), entre otros. Al otro lado de la tabla lideró las píérdidas el productor de aluminio Alcoa, que cerró con descenso del 2,15%, el fabricante de maquinaria pesada Caterpillar (-0,28%) y el grupo informático IBM (-0,06%).
En el mercado de divisas, el dólar continuó apreciándose frente al euro, que perdió un 0,54% y cada divisa común se cambia por 1,30 dólares. Contra el yen, por contra, la moneda estadounidense se mantuvo plana y el cambio se mueve en los 97,78 yenes. El oro, una jornada más, cayó con fuerza y en la sesión perdió un 4,17%, hasta los 1.223 dólares la onza, mientras que el barril de petróleo Brent repuntó un 0,37%, hasta los 101,6 dólares