El Corte Inglíés ya no está en Iberia. Antes de que Bankia vendiese el miíércoles el 12% de International Consolidated Airlines Group, el grupo de distribución se ha deshecho en las dos últimas semanas de su 1,8% que tenía en la aerolínea dueña de la empresa española de bandera y de British Airways. De esta forma, la participación nacional en la compañía que fuera pública se reduce al paquete del 2,7% que aún mantiene el Estado desde la privatización que llevó a cabo entre 1999 y 2001.
Fuentes financieras aseguran que el grupo de distribución ha aprovechado el fuerte interíés que había por comprar acciones de IAG por parte de los fondos institucionales, tal y como quedó demostrado este miíércoles en la desinversión de Bankia. La colocación acelerada del 12% que estaba en manos del banco público recibió una demanda de dos veces la oferta, por lo que hubo inversores que se quedaron con hambre de comprar más acciones del grupo con sede en Madrid.
Por ese motivo, El Corte Inglíés ha decidido saciar ese apetito que venía de lejos -es una de las mejores cotizaciones del Ibex 35 en 2013- y colocar su 1,8% por cerca de 100 millones de euros. La operación, que se ha realizado en las últimas dos semanas, según fuentes del mercado, se ha cerrado con unas plusvalías próximas a los 20 millones. Un ingreso extraordinario que le vendrá bien para hacer frente a la ralentización de la cifra de negocios derivada del descenso del consumo y el estrechamiento de los márgenes por la guerra de precios en el sector.
La participación en IAG había dejado de ser estratíégica para El Corte Inglíés desde el momento de la fusión entre Iberia y British Airways. La compañía presidida por Isidoro ílvarez entró en la aerolínea española en 1999 cuando el Gobierno del PP constituyó un núcleo duro para mantener la españolidad de la empresa. Se hizo con el 3% en una operación en la que tambiíén entraron Caja Madrid (10%), BBVA (7,3%), Logista (6,7%,) y Ahorro Corporación (3%).
Dos años más tarde, la Sociedad Estatal de Participaciones Industriales (SEPI) vendió el 48% a travíés de una oferta de acciones. Pero el ente público se tuvo que quedar con un 5% debido a que no pudo vender la totalidad de su participación por falta de demanda. Ese porcentaje se redujo posteriormente al 2,7% que aún mantiene el Estado español en IAG, el último reducto de lo que fue una compañía nacional.
Derivado de su paquete en IAG, El Corte Inglíés era dueño del 13% de Iberia, donde hasta ahora tiene asiento en el consejo de administración. Una presencia que le supuso algún mareo, debido a que el colectivo de los pilotos de la aerolínea lo acusaron de estar de acuerdo con el plan de ajuste promovido por la parte británica del grupo. Un papel incómodo, ya que el holding apenas tenía responsabilidades en Iberia, puesto que su inversión original fue motivada por una petición expresa del Ejecutivo que dirigía Josíé María Aznar en 1999.