El Ministerio de Hacienda no asumirá en su totalidad los costes del sistema elíéctrico previstos en la ley, sino una parte "muy inferior", y provocará de esta forma que buena parte de la carga de la reforma energíética que estudiará mañana el Consejo de Ministros caiga sobre consumidores y empresas, lo que anticipa subidas del recibo de la luz y fuertes recortes a los operadores.