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El presidente electo paraguayo, Horacio Cartes, manifestó sus diferencias con acuerdos adoptados por Mercosur dando fin a la suspensión que pesaba sobre Paraguay desde el pasado año.
Cartes, en una larga declaración llena de menciones a elementos legales pero escasa de definiciones sobre acciones futuras, criticó una supuesta falta de legitimidad del ingreso de Venezuela en el bloque integracionista.
Abogó, sin referirse concretamente a los acuerdos difundidos hoy, a la necesidad de velar por principios de igualdad jurídica entre los Estados, solidaridad y cooperación internacional como elementos que respetará su futuro gobierno.
Alega que en sus negociaciones con el Mercosur se fundamentó siempre en el respeto a las normas del derecho internacional y en la práctica del diálogo como instrumento idóneo para la solución de las diferencias.
En el ejercicio constitucional de la Presidencia de la República del Paraguay y de mi responsabilidad del manejo de las relaciones exteriores, actuaríé siempre dentro de estas líneas, manifestó.
Aseguró, seguidamente, que desarrollará una política bilateral y multilateral basada en una diplomacia conforme a lo que dicta la Constitución paraguaya, preservando la dignidad e intereses del país.
Planteó que el regreso de Paraguay al Mercosur será ejerciendo la plenitud de sus derechos, aunque no mencionó acción en contra de los otros Estados Miembros quienes acaban de restituirle todas sus atribuciones en esa instancia.
Por último, se compromete a desarrollar en todo momento las mejores vínculos bilaterales posibles con los Estados con quienes Paraguay mantiene relaciones diplomáticas.
En definitiva, la declaración de Cartes no ofrece una clara decisión sobre la oportunidad de la vuelta al Mercosur ni los pasos que dará su gobierno en esa dirección o para abstenerse del reintegro al bloque.