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La investigación en China de la farmacíéutica británica GlaxoSmithKline (GSK) confirma que Beijing se opone a cualquier forma de soborno, independientemente de que la compañía sea china o extranjera, dijo hoy un portavoz del Ministerio de Comercio.
El portavoz Chen Dayang expresó que las indagaciones sobre la GSK forman parte de los esfuerzos que realiza para mejorar el clima local de negocios, además de crear similares oportunidades entre inversionistas del país y extranjeros.
Cuatro funcionarios de GSK China fueron acusados de canalizar grandes sobornos a funcionarios de este país asiático y míédicos a travíés de agencias de viaje para impulsar las ventas ilegalmente y elevar los precios de sus medicamentos en esta nación.
Durante una conferencia de prensa en Beijing, Shen recordó que como es bien conocido cualquier compañía multinacional como la GSK tiene que respetar las leyes chinas para realizar inversiones.
