Por... John Kay
[El dinero es un juego basado en la confianza y su valor depende totalmente de la voluntad de otras personas por aceptarlo. /Bloomberg]
Hace unas semanas estuve en las Islas Galápagos, que forman parte de Ecuador. Como es inevitable, regresíé con un puñado de monedas. Hay una moneda de un dólar estadounidense y otra moneda que sólo dice en su cara "cincuenta centavos."
La moneda de 50 centavos se acuñó para el gobierno de Ecuador, pero no existe una moneda ecuatoriana, y por lo tanto el monto al cual se refiere no son centavos ecuatorianos. Ecuador es el país más grande del mundo en optar por lo que se denomina la "dolarización."
Hace una díécada, el gobierno tomó la decisión unilateral de adoptar la moneda de otro país: Ecuador utiliza el dólar de EU con la aceptación, pero no el acuerdo, del gobierno de los Estados Unidos y la Reserva Federal. La moneda en mi bolsillo representa 50 centavos de dólar, pero EEUU no emite monedas de 50 centavos, sólo de uno, cinco, diez, y 25 centavos.
Aunque todo el mundo en las Islas Galápagos o en Quito aceptaría mi moneda de 50 centavos, nadie en Washington lo haría. Curiosamente, las monedas genuinas denominadas en dólares, acuñadas por el Tesoro de EU, que no han gozado de gran popularidad en EU, circulan ampliamente en Ecuador.
Usted puede dolarizar sin el dólar. Montenegro, un bonito país balcánico de playas y montañas, tampoco tiene moneda propia. Montenegro utiliza el euro, a pesar de no ser miembro de la UE (y probablemente no lo sea en el futuro previsible) y no contar con la autorización del Banco Central Europeo. Al igual que Ecuador, Montenegro no imprime su propia moneda, pero importa una exclusivamente por su valor nominal.
Miríé con mayor detenimiento mi moneda ecuatoriana de 50 centavos cuando Alex Salmond, primer ministro de Escocia, pronunció un discurso en la Isla de Man ensalzando las virtudes de la relación que mantiene la isla con el Reino Unido. En este caso, la ingeniería es compleja. Al igual que las Islas del Canal, Jersey y Guernsey, la Isla de Man no forma parte del Reino Unido ni de la UE, no es una dependencia británica o colonia y tiene su propio gobierno.
Pero ningún país reconoce estas islas como estados soberanos; sus habitantes tienen pasaportes británicos, y Gran Bretaña es responsable por su defensa (pero no de manera muy eficaz: las Islas del Canal, situadas frente a la costa de Normandía, fueron ocupadas por los alemanes durante la Segunda Guerra Mundial e incluso despuíés de la liberación de Francia. Las tropas alemanas se mantuvieron en control hasta que se firmó el armisticio. El Tercer Reich nunca incorporó la Isla de Man: no creo que la isla y su población de menos de 100,000 personas en medio del Mar de Irlanda tenían mucha importancia en los planes de Adolf Hitler por dominar el mundo.
La Isla de Man, al igual que Jersey y Guernsey, imprime sus propios billetes. Los papeles dicen "una libra" en su faz, pero al igual que la moneda ecuatoriana, no se sabe con certeza lo que eso significa. Los bancos de la isla le cambiarán, aunque no están obligados a hacerlo, esos billetes por los del Banco de Inglaterra si usted lo pide. Al igual que con la moneda ecuatoriana, los billetes de la Isla de Man son generalmente aceptados dentro de la isla, pero no en otros lugares.
¿Quíé significan estos pedazos de papel? ¿Están denominados en libras de la Isla de Man o libras esterlinas, o son la misma cosa? Nadie formula esas preguntas porque las respuestas no parecen tener importancia. Y, al igual que con la moneda de 50 centavos en el Ecuador, el emisor de la moneda principal no se preocupa particularmente porque los montos involucrados son muy pequeños.
Hay billetes de banco escoceses, pero estos son diferentes a los emitidos por la Isla de Man o Jersey. Las notas escocesas son emitidas por el Banco de Escocia, el Royal Bank of Scotland y el Clydesdale Bank. En su faz los billetes dicen "una libra esterlina" (los de la Isla de Man y Jersey sólo dicen "una libra") y su emisión está respaldada por notas de un valor similar del Banco de Inglaterra. Sin embargo, cuando los dos mayores bancos escoceses se derrumbaron en 2008, sus portadores se enfrentaron a la posibilidad de que el dinero en sus bolsillos y carteras era sólo un facsímile de un acreedor no garantizado en caso de una liquidación. Hoy en día, el valor de estas notas está garantizado por el gobierno del Reino Unido.
Pero el sentido de esta garantía es simplemente que el Plan de Compensación de Servicios Financieros (Financial Services Compensation Scheme) le cambiará la moneda por un billete del Banco de Inglaterra en caso de que un banco escocíés no cumpla su promesa de pago. El dinero es un juego basado en la confianza y su valor depende totalmente de la voluntad de otras personas por aceptarlo. El dinero es lo que usted decida que es. Y así, tal vez, tambiíén lo es la independencia.