La estadounidense Delta Air Lines, la segunda mayor compañía aíérea del mundo mientras la unión entre American Airlines y US Airways siga bloqueada, ha anunciado este miíércoles un pedido de 40 aviones al consorcio europeo Airbus. Se trata de 30 unidades de la familia a A321 y el resto del modelo A330. El valor en cartera del encargo es de unos 4.240 millones de euros. Delta recibirá los aviones entre 2015 y 2017.
La flota actual de Delta ronda los 727 aviones, la más grande despuíés de la tambiíén estadounidense United. La aerolínea opera tanto aeronaves de Airbus como de Boeing, así como algunos de la extinta McDonell Douglas (absorbida por Boeing). Esta mezcla se deriva de la fusión de Delta con Northwest en 2008. Pero los aparatos del fabricante europeo siguen siendo minoría, con cerca de 160 unidades operativas frente a los más de 370 de Boeing. Esta compra se enmarca en el proceso de renovación de la flota de la compañía.
Para justificar la apuesta por Airbus, la dirección de Delta se refiere a la eficiencia y la tecnología de los dos modelos. Pero en especial, Richard Anderson, su consejero delegado, menciona “la flexibilidad†que dan los A330 y A321 al gestionar la capacidad y ajustarla a la demanda. Muchas aerolíneas tradicionales están comprando aviones nuevos para reducir costes operativos.
El A321, el hermano mayor del súperventas A320, puede transportar entre 185 y 220 pasajeros y tiene un alcance de vuelo de casi 6.000 kilómetros, lo que le convierte en un modelo versátil para rutas de distancias y densidades muy distintas. El A330-300, por su parte, está indicado para viajes transoceánicos, ya que puede acomodar a casi 300 viajeros y recorrer distancias de 10.800 kilómetros sin repostar