Citi considera que la calidad de los activos sigue siendo el mayor reto que afronta la banca española, pero calcula que los activos problemáticos que despiertan las dudas entre los inversores deberían tocar su techo en 2014, a partir de cuando empezarán a reducirse un 30% hasta 2016.
Los analistas de Citi subrayan que los activos problemáticos de la banca representan el 16,9% del total de activos en España a junio de este año, y cree que la mayoría de los activos adjudicados deberían venderse con descuentos de entre el 10% y el 15% en 2018.