Los inversores internacionales sacan a España del congelador
En poco menos de un año, España ha pasado de ser el apestado del grupo a esa persona interesante y desconocida que todos quieren ir poco a poco incluyendo en su círculo de amigos. Todo esto se refleja en el evidente cambio de sentimiento de los analistas y estrategas, que desde el inicio del verano han comenzado a señalar a los activos españoles como una de las mejores oportunidades de inversión de cara a los próximos meses.
Tanto acciones como bonos empiezan a ocupar un lugar cada vez más destacado en las carteras modelo, y los que antes ordenaron tachar al país de su lista, hoy lo recomiendan con mayor o menor entusiasmo. Este proceso de mejora de la percepción sobre España se ha apoyado en una incipiente recuperación de los datos macroeconómicos y un pujante sector exterior que está creciendo de forma sostenida. Pero además de la dinámica propia del país, España ha tenido la inestimable colaboración de la situación de los países emergentes.