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La aprobación del proyecto para abrir a la inversión privada zonas sensibles de la economía paraguaya recibió duros calificativos de cuatro bancadas en el Senado y el rechazo de las centrales sindicales.
El gobernante Partido Colorado y sus aliados liberales y del grupo Unacíé lograron 26 votos para imponer la aceptación en sesión extraordinaria del documento, frente a los 16 votos de los senadores opuestos a dicha ley.
El señalamiento de entrega del país y de instrumento para lograr la privatización de los servicios públicos, unido a la protesta por el arrebato de los derechos de control del Parlamento a las concesiones que se hagan, fueron esgrimidos durante la compleja sesión.
Las bancadas opuestas fueron las del Frente Guasú y los partidos Encuentro Nacional, Demócrata Progresista e incluso varios congresistas liberales, que llevaron adelante una sólida oposición a la aprobación del proyecto.
Tras aprobarse en lo general la propuesta y plantearse por los protestantes la sanción artículo por artículo, senadores de la mayoría abandonaron el recinto e impidieron hacerlo por falta del quórum reglamentario.
Ello hace que el proyecto se considere aprobado por la Cámara Alta y pase ahora nuevamente a la Cámara de Diputados con algunas pequeñas modificaciones para la votación final, la cual será positiva seguramente por el alto control gubernamental en esa instancia.
Por su parte, las centrales sindicales unidas en un pronunciamiento aseguraron que se quiere vender el país a los grandes intereses nacionales y extranjeros en forma inconstitucional y anunciaron movilizaciones y protestas para los próximos días.
