Tras un nombre que parece más bien el de una marca de cosmíéticos –Maxam–, y una web que podría confundirse a primera vista con la de una ONG –“productos y servicios de alta tecnología y calidad para el progreso y desarrollo sostenible tanto de nuestros clientes como del conjunto de la sociedadâ€â€“ se encuentra una compañía española centenaria, que emplea a miles de personas, presente en todo el mundo y que sin embargo es poco conocida. A pesar de tratarse de un grupo que compite por convertirse en el líder mundial de explosivos, que cuenta en su consejo de administración con reconocidos miembros de las finanzas y la empresa española y que en un futuro próximo –de aquí a cinco años– probablemente protagonice una sonada salida a Bolsa.
El grupo Maxam, cuyos orígenes se remontan a la Sociedad Española de la Pólvora creada por Alfred Nobel en 1872, superó por vez primera en su último ejercicio finalizado el pasado mes de marzo los 1.000 millones de euros de facturación. La compañía ingresó 1.088 millones (992,7 millones en 2012; 889,3 millones en 2011) y alcanzó un ebitda de 116 millones; logró un beneficio de 24,6 millones (35 millones en 2012) y situó su deuda financiera en 489 millones.
Maxam tiene instalaciones en 45 países y emplea a 5.940 personas. El grupo, que apostó decididamente por la internacionalización en 2001, controla ahora más de 140 compañías en los cinco continentes. En 2007 el negocio internacional suponía el 49% del total de Maxam; en la actualidad el mercado español representa sólo el 10%. La multinacional española divide su actividad en cinco unidades: explosivos de uso civil; cartuchos y pólvora de uso deportivo; artículos y servicios para la industria de defensa; materias primas en nitro química; soluciones en seguridad y medio ambiente
En 2006 las firmas de capital riesgo Vista Capital y Portobello (antes Ibersuizas) se hicieron con el 49% del grupo de explosivos, que pasó a denominarse Maxam (antes, Unión Española de Explosivos). A finales de 2011 las sociedades de inversión españolas vendieron su participación a la estadounidense Advent, uno de los mayores grupos de capital riesgo del mundo, propietario en España de la tasadora inmobiliaria Tinsa y que ha participado en Parques Reunidos, Jazztel o el grupo de maquinaria Hune.
En la actualidad el capital de Maxam se reparte entre Advent, con el 45%, y el equipo directivo con el 55%, liderado por el presidente de Maxam, Josíé Fernando Sánchez-Junco (consejero en Ferrovial, vicepresidente de Dinamia; en 1986 sustituyó a Eduardo Santos en la Dirección General de Industrias Siderometalúrgicas y Navales).
Díaz-Laviada, Eguidazu, Bergareche
En el consejo de administración de Maxam se sientan viejos conocidos de las finanzas y la empresa española, varios coinciden en los consejos de otras grandes compañías y la mayoría ha participado ya en operaciones de salida a Bolsa de empresas españolas.
Representando a Advent en Maxam se encuentran Juan Díaz-Laviada, presidente de Advent España; Jaime Carvajal Urquijo, ex presidente no ejecutivo de Ford España y Ericsson, presidente de ABB Spain; Carlos Santana García Fuster, y Gí¼nter von Au, primer ejecutivo de Advent en inversiones en la industria química.
Tambiíén son consejeros del grupo español de explosivos Santiago Eguidazu, presidente de N+1; Santiago Bergareche Busquet, consejero de Vocento; Javier Targhetta, presidente de Atlantic Copper; Guillermo Ulacia, que ha sido ejecutivo de General Motors, Gamesa o Arcelor; y Carlos Gastañudy, ejecutivo de Maxam.
Díaz Laviada y Carvajal Urquijo fueron fundadores de la firma de inversión Iberfomento. El presidente de Maxam, Josíé Fernando Sánchez-Junco, Santiago Bergareche y Carvajal coinciden en el consejo de administración de Ferrovial. Bergareche es tambiíén presidente no ejecutivo de Dinamia, la única sociedad de capital riesgo española cotizada, controlada por N+1, el grupo de inversión creado por Eguidazu.
Si la compañía, que a principios de este año firmó un críédito sindicado por 280 millones, logra cumplir objetivos propuestos para el año 2015, la alta dirección del grupo recibirá 12 millones de euros en stock options.
El ICO, Uzbekistán, China, Australia
En poco más de una díécada Maxam se ha convertido en una multinacional suponiendo en la actualidad el mercado español tan sólo el 10% de su negocio total. El Instituto de Críédito Oficial (ICO) ha apoyado esa internacionalización.
En Uzbekistán, la filial del grupo presidido por Josíé Fernando Sánchez-Junco, Maxam Chirchiq, emplea a más de 6.000 personas. En 2007 Maxam recibió un contrato de financiación con el ICO por 65 millones de dólares para financiar la adquisición del 49% de la empresa de Uzbekistán.
En 2011 Maxam suscribió otro contrato de financiación por 19 millones de euros con el ICO para apoyar el plan de inversiones del grupo español en China. Entre este año y 2014 una empresa conjunta formada con dos socios locales iniciará la producción en una nueva fábrica.
Además Maxam tiene firmados príéstamos de línea ICO por valor de 47 millones de euros (en 2011) y por 21 millones (en 2012).
Australia es otro de los principales mercados de Maxam, uno de los primeros fuera de España en los que se posicionó el grupo, donde emplea a 200 personas. Recientemente ha sido seleccionado junto con BAE Systems como uno de los tres consorcios que optan a la adjudicación de un contrato de Defensa.