Wall Street vive instalado en una tendencia bajista que ya le ha llevado a perder un 5,7% desde su máximo histórico. Despuíés del gran avance que experimentó en los nueve primeros meses del año, que tuvieron su culminación en los 15.676 puntos que el Dow Jones alcanzó el 18 de septiembre, los acontecimientos de las últimas semanas han sembrado el pánico vendedor en el parquíé neoyorquino.
La incapacidad de republicanos y demócratas para llegar a un acuerdo y aprobar los presupuestos del próximo año y, especialmente, la posibilidad de que el próximo 17 de octubre Estados Unidos alcance su techo de gasto y la administración incurra en un default, ha hecho que el Dow Jones cotice en los 14.776 puntos despuíés de que en la sesión de este martes cerrase con una caída superior al punto porcentual. De esta manera, el índice ha perdido 900 unidades en menos de un mes
La situación es similar en el resto de índices. El S&P 500, que en ese mismo 18 de septiembre marcó en los 1725 puntos su máximo histórico, se mueve hoy un 4% por debajo de ese nivel -concretamente en los 1.655 puntos-. Y el Nasdaq, que recientemente alcanzó cotas en las que no se movía desde 2000, perdió en la segunda sesión de esta semana un 2% y acabó en los 3.694 puntos.
El dólar tambiíén está sufriendo esta situación, ya que despuíés de que durante el mes de septiembre el euro llegara a cambiarse por 1,31 dólares, la divisa común europea ya está en el 1,35 e incluso recientemente llegó a tocar los 1,36 dólares, aunque buena parte de este movimiento tambiíén se debe a la decisión de la Reserva Federal de mantener el nivel de sus estímulos monetarios.
En el mercado de deuda, en cambio, la situación es notoriamente diferente. En el 'glorioso' mes de septiembre para la renta variable, la rentabilidad del bono estadounidense a 10 años rozó el 3%. Hoy, despuíés de varias sesiones en las que la referencia ha relajado su rentabilidad, el interíés se mueve en el 2,63%.
En lo que respecta a la sesión de este martes, las dudas de los inversores provocaron que sólo tres valores del Dow Jones fueran capaces de acabar en positivo: Walmart, Procter&Gamble y Coca Cola. Más dura fue la jornada para las tecnológicas -no en vano el Nasdaq cayó con fuerza- y Facebook se despeñó un 6,6%, Netflix cedió un 5% y Yahoo! hizo lo propio.
