Por... KEN SWEET
NUEVA YORK -- Casi se pudo escuchar a Wall Street respirar de alivio.
Los precios de las acciones subieron pronunciadamente el jueves en la Bolsa de Valores de Nueva York, despuíés de que el presidente Barack Obama y los líderes republicanos finalmente dieron indicios de que podrían poner fin a la parálisis presupuestal que lleva 10 días y que amenazó con hacer que Estados Unidos dejara de pagar sus obligaciones.
El índice Standard & Poor's 500 subió 36,16 puntos, 2,2%, a 1.692.56. El promedio industrial Dow Jones creció 323,09 unidades, 2,2% para ubicarse en 15.126,07 y el tecnológico Nasdaq avanzó 82,97 puntos para quedar en 3.760,75.
Fue el mejor día para el mercado desde el 2 de enero.
"Los y las congresistas están llegando a aceptar lo calamitoso que sería no elevar el techo de la deuda", dijo Joseph Tanious, estratega de J.P. Morgan Asset Management. "Las mentes frías están prevaleciendo".
El mercado estuvo bajando desde mediados de septiembre debido a la crisis en Washington, donde un ala derechista del Partido Republicano en la Cámara de Representantes se ha negado a aprobar el presupuesto hasta que el presidente Barack Obama anule su reforma al sistema de salud. Obama se ha negado, y el resultado ha sido un cierre parcial de las dependencias del gobierno.
La amenaza de los republicanos de negarse a extender el tope de endeudamiento permitido llevaría a Estados Unidos a estar en mora por primera vez en la historia y generaría caos en los mercados financieros. Para el miíércoles el S&P 500 había caído 4% desde llegar a su tope de 1.725 unidades el 18 de septiembre.
El presidente Obama tiene pautado reunirse con líderes republicanos de la cámara baja en la Casa Blanca el jueves en un esfuerzo por resolver el estancamiento.
La bolsa neoyorquina había estado en alza todo el día, pero los avances se aceleraron luego que el presidente de la Cámara de Representantes, el republicano John Boehner, dijo a reporteros que la cámara baja aprobaría extender temporalmente el tope de la deuda, aunque sólo si el presidente Obama accedía a negociar. La propuesta por lo menos da a las partes más tiempo para llegar a un acuerdo más amplio.
Un aumento del tope de la deuda es de crucial importancia. El secretario del Tesoro Jack Lew ha declarado reiteradas veces que el gobierno estadounidense alcanzará su máximo permitido de críédito el 17 de octubre. Ello dejaría al gobierno con apenas un par de semanas de liquidez antes de entrar en riesgo de mora de pagos.
Una extensión temporal del tope de deuda "es la estrategia correcta", opinó Jack Ablin, gerente de BMO Private Bank.
"Ello le permitirá a los políticos calmar los ánimos un poco pero al mismo tiempo mantiene visible el tema central de la controversia", agregó Ablin.
Además, los precios de las acciones de empresas pequeñas subieron más que las del resto del mercado. Tales acciones por lo general son más riesgosas que las de empresas grandes y establecidas, pero a la vez, tienen el potencial de generar más ganancias. Un crecimiento abrupto de las acciones de empresas pequeñas significa que los inversionistas están más cómodos asumiendo riesgos. El índice Russell 2000 subió 26,04 puntos (2,5 y cerró en 1.069,50.
Fidelity Investments, la empresa de inversiones de fondos más grande del país, dijo el miíércoles que había vendido toda su deuda estadounidense a corto plazo, a fin de limitar el riesgo para los inversionistas en caso de una mora de pagos.
En el mercado surgieron buenos indicios para la deuda estadounidense a corto plazo. El rendimiento de los bonos del Tesoro a un mes bajó de 0,27% a 0,25%.
El rendimiento se había disparado luego de estar casi en cero a comienzos de mes, alcanzando 0,35% el martes, debido a que los inversionistas vendieron sus bonos por temor a que el gobierno no podrá recomprarlos cuando expiren. Los inversionistas exigen un mayor rendimiento cuando perciben que la deuda es más riesgosa.
En otros mercados, el índice británico FTSE 100 ganó 1,5%, el alemán DAX subió 2% y el francíés CAC-40 avanzó 2,2%. En Japón el índice Nikkei ganó 1,1%.
En la Bolsa Mercantil de Nueva York, el crudo de referencia para entrega en noviembre subió 1,40 dólares para cerrar en 103,01 dólares por barril. En Londres, el petróleo Brent se incrementó 2,47 dólares a 111,80 dólares por barril.