EFE
Fiscales y funcionarios de Sanidad de CHanghua, ubicada en el centro de Taiwán, registraron y tomaron muestras de aceite en la empresa Chang Chi Foodstuff Factory Co., sospechosa de adulteración de aceite de oliva español.
Las autoridades taiwanesas requisaron 2.490 litros de aceite de oliva español, materias primas y los libros de contabilidad de la empresa, para investigar cargos de fraude y violación de las leyes de seguridad alimentaria.
Las muestras del supuesto puro aceite de oliva español de la marca Tatung fueron enviados al Buró de Salud Pública del Distrito de Changhua para ser examinadas.
El presidente de la empresa, Kao Cheng-li, ha sido interrogado y liberado bajo fianza con la prohibición de salir del país.
Investigaciones preliminares apuntan a que el aceite venido por Tatung no es peligroso para la salud, pero sí está adulterado con la adición de otros aceite comestibles baratos.
Exámenes de muestras del aceite de oliva de la empresa Chang Chi realizados el año pasado mostraron que no era puro, pero la empresa adujo que los resultados se debían a contaminación en el proceso de embotellado y tan sólo recibió una multa.
En marzo de este año, se presentaron nuevas denuncias contra la compañía y el Buró de Salud Pública de Changhua realizó sus propios exámenes del producto, que mostraron niveles anormales de acidez en el aceite de oliva, pero en exámenes posteriores no se halló nada especial.
Taiwán es un interesante mercado para el aceite de oliva español, dado el creciente consumo de este producto, y aparte del aceite de oliva español embotellado en España con marcas españolas, varias empresas taiwanesas lo embotellan y venden bajo sus propias marcas.