Por... Masiel Fernández Bolaños
El aumento de los costos de la energía determinó en septiembre un ligero avance en los precios al consumidor en Estados Unidos, reportó el Departamento de Trabajo.
Los precios al consumo subieron 0,2 por ciento tras el 0,1 precedente, lo cual debe dar mayor margen a la Reserva Federal para seguir con su política monetaria flexible.
La entidad precisó que en la comparación interanual el indicador trepó 1,2 por ciento, el menor incremento desde abril pasado.
La inflación fue impulsada por un alza del 0,8 por ciento en los costos de la energía, lo cual resultó responsable de casi la mitad del incremento, añadió.
Los importes de los alimentos permanecieron estables mientras que los de vivienda y salud ascendieron.
Analistas remarcaron que el actual comportamiento de la inflación debe permitir a la Reserva mantener el curso de sus compras mensuales de bonos en su intento por estimular a la economía a travíés de tasas de interíés bajas.
Empero, algunos funcionarios manifiestan su preocupación al considerar que el indicador está demasiado bajo.