Charlamos por teléfono con Noel Hogan, guitarrista y compositor de The Cranberries, acerca de In the end, el que será el último disco de la banda irlandesa. Por momentos nos emocionamos al escuchar su voz entrecortada conforme se va llenando de recuerdos. Nos confiesa que ha sido muy difícil volver al estudio y terminar este álbum casi premonitorio en algunas de las canciones que Dolores O'Riordan les dejó escritas.Ha pasado algo más de un año, pero la herida no termina de cicatrizar. Dolores desapareció repentinamente, y desde entonces, muchas han sido las especulaciones y publicaciones que su familia y compañeros de viaje han tenido que sobrellevar. Todavía se despiertan por la mañana pensando que recibirán esa llamada que les permitirá volver a escuchar su voz, la voz única de Dolores. Sus canciones, el consuelo que le queda a su familia. Para ellos hay una dedicatoria. Al leer la letra de A place I know, Noel se dió cuenta inmediatamente de que la había compuesto para una de sus hijas.PUBLICIDADinRead invented by TeadsIn the end arranca con All over now, una de las primeras en llegar y un intento de Noel de escribir una canción que sonara como una de sus bandas favoritas, The Cure. “Eso es lo que tenía en mente musicalmente. Luego se la envié a Dolores y al cabo de unos días me la devolvió con la primera estrofa y el estribillo. La canción se construyó a partir de la música”. In the end, la ilusión de Dolores O'Riordan¿Es este el final de The Cranberries?Así es. Sin Dolores no hay banda, no hay nada. De hecho, la canción que titula el disco es una despedida que probablemente se convierta en el himno póstumo de la banda irlandesa. “Es una canción muy poderosa. Incluso si este no fuera el fin de The Cranberries, si Dolores siguiera viva, la canción formaría parte de este disco. Habla de las esperanzas que uno tiene y de cuando consigue hacerlas posible. Es la última canción que grabé junto a los chicos antes de que el disco estuviera finalizado. Ese día de grabación en el estudio fue muy emotivo. Era el final, la última vez, después de todo este tiempo, que nos juntábamos como The Cranberries. Mike, Ferg y yo nos conocíamos de mucho antes de formar la banda. Tocábamos juntos antes de que llegara Dolores así que hemos pasado toda una vida juntos, y no es habitual que esto suceda. Es triste por una parte, pero supongo que deberíamos celebrar todo lo que hemos conseguido. Cuando empezamos no éramos nada, llegamos a ser una banda más grande de lo que nunca soñamos y hemos tenido unas vidas alucinantes haciendo esto. Tenemos que estar agradecidos por ello”, nos cuenta Noel Hogan. Pero en In the end no todo es oscuridad y drama, es un disco con unas letras muy poderosas que hablan de superar el pasado y afrontar el presente en positivo. Desafortunadamente para Dolores, al final todo quedó en una ilusión, en un objetivo sin cumplir. “Había superado muchos de sus problemas y estaba entusiasmada con este nuevo disco y con la idea de salir de gira”, afirma Noel. Got it, la última canción que le envió y que había tenido por ahí merodeando durante bastante tiempo hasta que un buen día decidió volver a retomarla, es un tema muy pegadizo, con un sonido más pop de lo que la banda nos tenía acostumbrados. "Quizás los fans esperan un disco más oscuro, pero con In the end se van a llevar sorpresas".Y si te gustan los Cranberries de siempre, no puedes perderte Catch me if you can. Otro de los temas de Dolores que Noel recibió en forma de demo y que “al trabajar en él fue adquiriendo un sonido muy Cranberries. Al final decidimos añadirle una sección de cuerdas”. Y sorpresa, los músicos son los mismos que tocaron en hits como Linger y Ode to my family. Wake me when it’s over, refleja el estilo y personalidad de Dolores como compositora, con su enorme estribillo al estilo de Zombie. “Nos encantó cuando la escuchamos porque estábamos seguros de que se podría convertir en un gran himno de la banda”.Hay buena parte del espíritu del primer disco de The Cranberries en este nuevo trabajo y es algo que la banda ha intentado capturar deliberadamente. En primer lugar, volviendo a trabajar con el productor de sus primeros discos, Stephen Street. “En ningún momento hemos intentado reinventarnos ni volvernos locos. La idea era volver al principio y recuperar la esencia”. Y con ese regreso al pasado conecta directamente la portada de In the end, en la que todos los componentes de la banda aparecen representados como niños.“Cuando conocí a Dolores me pareció una chiquilla muy tímida, callada y vergonzosa”. Y a menudo podemos sentirla un poco perdida y vulnerable al interpretar las canciones de In The End, un disco que verá la luz el próximo 26 de abril. Será el octavo y el último de The Cranberries. La próxima semana compartiremos con vosotros nuestra charla completa con Noel Hogan, fundador de The Cranberries.
Hablamos con Noel Hogan, guitarrista y compositor de The Cranberries, acerca de la despedida de la banda irlandesa. Este viernes 26 de abril ve la luz In the end, el disco que pone punto y final a sus 30 años de historia.Noel, ¿cómo te sientes un año después de la muerte de Dolores?Todavía es muy reciente. Sé que ya ha pasado un año, pero para mí es como si sólo hubieran pasado unos meses. Es como si todavía estuviera esperando que me llamara o me mandara un email o algo así. Cuando pasas mucho tiempo con una persona lleva tiempo hacerse a la idea. Perder a alguien es algo complicado a lo que supongo que te tienes que acostumbrar.¿Qué es lo que más echas de menos de ella?Dolores era muy divertida, ¿sabes? Tenía un gran sentido del humor. Solíamos reírnos un montón, especialmente mientras trabajábamos. Algunas personas se ponen muy serias cuando trabajan, pero nosotros nos divertíamos mucho juntos. Éramos como cuatro chiquillos de una pequeña ciudad de Irlanda que escribíamos canciones y las tocábamos juntos. Y al final la banda creció y nos llegó el éxito masivo, pero cuando se suponía que las cosas debían ponerse más serias, ella siempre encontraba el lado divertido. Echo mucho de menos esto. Y también componer con ella. He estado escribiendo canciones el último año, pero es raro porque ya no estaba escribiendo para Dolores, sino que estaba componiendo para otras personas y esas canciones nunca serán escuchadas. Eso es lo que más voy a echar de menos.Siempre has dicho que Dolores y tú escribíais buenas canciones cuando las cosas no iban demasiado bien.Sí, y hay cierta ironía en ello. En el momento en que empezamos a trabajar en este álbum todas las malas cosas que había estado sufriendo parece que desaparecieron de repente. Dolores tenía problemas importantes pero parecía que por fin los había podido controlar. Las cosas iban bien y estaba muy emocionada con este año, con hacer el disco, salir de gira y todos los planes que teníamos previstos. Antes de que muriera, pensaba que por fin estaba todo bien, así que creo que esa es una de las cosas más duras de aceptar.Este disco In the end, habla de superar el pasado y afrontar el presente.Sí, muchas de las canciones del disco cuentan historias sobre cosas y momentos que pasaron años atrás, y de las que hemos estado hablando largo y tendido en primera persona. El resultado son muchas cosas que teníamos que contarnos. Creo honestamente que si Dolores no hubiera fallecido, hubiera escrito más canciones antes de empezar a grabar en el estudio. Era muy constante escribiendo canciones, y las de este disco las escribió entre junio y diciembre de 2017.¿Como trabajasteis con Dolores en sus últimos meses de vida?Dolores nos mandaba demos. Con ellas solía compartir alguna idea para que le pusiera la voz y entonces siempre me decía: se me ha ocurrido tal cosa, ¿qué te parece? Y yo le decía si me gustaba o no... A veces me mandaba una letra o un estribillo, a veces una canción terminada. En un periodo de seis meses es difícil hacer un disco entero, así que tengo muchas piezas sueltas en mi disco duro de cuando murió. Es algo que hacíamos habitualmente cuando estábamos grabando.¿Qué sentiste cuando encontraste más canciones después de su muerte?Mientras escribíamos nos mandábamos lo que creábamos una y otra vez, así que ya tenía muchas de esas canciones en mi disco duro. Pero había otras partes de canciones que no me había mandado y que su pareja me trajo una vez que falleció para que no se perdieran. De algunos temas, como por ejemplo, All over now, tenía los coros y poco más, y hasta que no vino su pareja no me di cuenta de que había terminado la demo completa. Sé que hay algunas teorías por ahí sobre la existencia de más canciones pero no sé nada de momento.The Cranberries: “Dolores tenía problemas importantes pero parecía que por fin los había podido controlar”¿Y cómo afrontas el futuro sin Dolores a la hora de componer?Ya he empezado a interesarme por hacer colaboraciones con otros artistas. El trabajo con The Cranberries de los últimos 12 meses, desde hacer el álbum hasta prepararnos para este momento, ha terminado. Así que voy a probar suerte con otras personas. Creo que lo mejor es avanzar y colaborar con otra gente. Porque The Cranberries no va a continuar y no quiero empezar otra banda ni unirme a otro grupo. No me interesa en este momento, así que voy a probar a escribir otras cosas.Este mes de abril entonces, ¿final definitivo de The Cranberries con este disco?Sí, así es. Aquí termina todo.¿En ningún momento os habéis planteado continuar con otra vocalista, como han hecho otras bandas?Dolores era una parte demasiado importante de este grupo. No puede ser reemplazada por nadie, así que no estamos interesados en hacer nada parecido. Estamos felices de dejar las cosas así y que el legado de la banda viva para siempre. Me preocuparía que al hacerlo de la otra manera se destruyera todo lo que hemos construido. Creo que está bien saber en qué momento debes abandonar una fiesta.¿Cuáles son los mejores momentos para ti de estos 30 años de carrera?Creo que me quedo con los inicios, con los días en los que éramos cuatro jóvenes que intentaban que su música llegara a todo el mundo tocando en pequeños clubs, haciendo de teloneros de otras bandas. Al principio era una diversión un poco dañina, porque es una vida dura, pero cuando miras atrás, es que fue la primera vez que hicimos un montón de cosas: la primera vez que salimos de gira, la primera vez que grabamos un disco, la primera canción que sonó en una radio... Todas esas cosas te hacen sentir que estás trabajando duro para conseguirlas. Es algo tuyo. No ha habido ayudas externas. Estaba la banda y un par de amigos que venían a los shows. A medida que crece se complica con managers, abogados, compañías de discos y se convierte en un negocio. También está bien, pero para mí los recuerdos de esos primeros días es de con lo que me quedo de toda esta carrera antes de conquistar el éxito.¿Cuál fue tu primera impresión de Dolores cuando todavía no la conocías y se presentó a la audición?Me pareció una chiquilla muy tímida, callada y vergonzosa. En la audición estaba muy nerviosa. Estábamos los tres y un puñado de nuestros amigos y se sentía muy intimidada. Pero cuando empezó a cantar nos sorprendió a todos. No me podía creer que teniendo una voz así estuviera buscando una banda, así que pensamos que tenía que estar con nosotros y enseguida encontramos la química que buscábamos.Antes de despedirnos, ¿con qué te quedas de vuestras visitas a España?Siempre que hemos ido a España ha sido alucinante. Cuando cantas en inglés te das cuenta y te sorprendes de cómo viaja tu música y cómo se convierte en un éxito fuera de tu país. Cuando viajas a países como España te quedas alucinado por la reacción de la gente, porque es muy pasional. Siempre estábamos deseando volver porque te garantizaba grandes conciertos y muchas emociones. Recuerdo una vez antes de tocar que incluso estuvimos más de una hora parados dentro de un autobús porque había una marea de gente tan grande esperando nuestro concierto, que no podíamos ni entrar…
No estaba previsto que In The End, el disco que The Cranberries acaba de lanzar, fuese a ser el último de la banda irlandesa, hasta que en medio del proceso de composición sobrevino la muerte de su líder, la magnética Dolores O'Riordan, a la que va dedicado este álbum de bella factura."Iba a ser un álbum más y me gusta pensar que aún podríamos haber hecho unos cuantos", reconoce al otro lado del teléfono Noel Hogan, guitarrista y coautor de las canciones, para quien la iniciativa de concluir el trabajo iniciado junto a su compañera "era una bonita manera de acabar" esta aventura.La publicación del nuevo álbum, que representa el octavo de estudio en su carrera y recoge las últimas grabaciones vocales de O'Riordan, es noticiosa además porque constituye el primer material original del grupo desde que hace 7 años publicaran Roses.Según cuenta Hogan durante una entrevista con Efe, la iniciativa de lanzar nuevos temas surgió durante los ensayos de su disco Something else (2017), en el que reinterpretaban en clave acústica grandes éxitos como Zombie, Linger o Just my imagination.Ya en su primera parada de la gira ese mismo año, en Polonia, la inspiración asaltó al guitarrista, que rápidamente esbozó el tema que hoy lleva por título A Place I Know, al cual puso letra O'Riordan en apenas dos días, si bien es cierto que el grueso de la composición lo acometieron a partir de junio."Dolores estaba más entusiasmada que preocupada por este disco, al que dedicamos mucho trabajo", relata Hogan, incrédulo aún por la muerte de su compañera, de la que recibió un correo electrónico con correcciones apenas unas horas antes de que se ahogara en la bañera de su hotel en Londres estando ebria.Entre los temas del álbum, destacan piezas confesionales como Lost, con letras en las que la artista, que reconoció haber sido víctima de abusos sexuales de pequeña, canta: "Siento que la tormenta se aproxima, me pregunto por dónde debería empezar. En el pasado, en el pasado, creo que aún vivo en el pasado, y sé que el tiempo ha pasado muy rápido"."Ella había hecho muchas declaraciones al respecto y está todo muy documentado, no es de extrañar que sus canciones fuesen un reflejo de lo que le había pasado, pero quería dejar todo eso atrás y pasar página. Entonces pasó lo de su muerte...", afirma, incrédulo aún por lo sucedido.Después de pensarlo mucho y siempre con el beneplácito de la familia, decidieron acabar lo que habían empezado, especialmente porque las maquetas que O'Riordan había dejado con su voz eran tan buenas que el álbum serviría como perfecto homenaje."Fuimos muy afortunados de que entrara en nuestras vidas y de la química que se estableció entre nosotros cuando componíamos. No creo que vuelva a pasarme con nadie. Teníamos nuestros altibajos, pero éramos amigos antes que cualquier otra cosa", señala Hogan, aún apenado por la falta.Para la producción del disco contaron con Stephen Street, el hombre que les ayudó a moldear el sonido de sus primeros trabajos, los celebrados Everybody Else Is Doing It, So Why Can't We? (1993) y No need to argue (1994)."Supongo que con este disco hubo un intento de captar la energía de aquellos discos, no de reinventar nada a estas alturas, cuando sabíamos que sería nuestro último álbum", reconoce ante una portada que, con unas versiones infantiles de sí mismos, representa "el principio y fin de la banda".En sus 30 años de existencia, desde la fundación de The Cranberries, en 1989 en Limerick (Irlanda), alcanzaron fama internacional junto a Fergal Lawler y Mike Hogan gracias a su combinación de pop-rock alternativo y elementos del folk celta."Nunca pensamos que tendríamos ese éxito. En el mejor de los casos, esperábamos lanzar unos pocos discos en Irlanda. Durante mucho tiempo, sobre todo hasta mediados de los años 90, creía que no estábamos en el lugar que nos correspondía y solo en los dos últimos años fui consciente del legado que representaron canciones como 'Linger' y 'Dreams'", asegura el guitarrista.A pesar de ello, para él no tiene sentido continuar The Cranberries sin O'Riordan. "No sé cuáles son los planes de los chicos. Me gustaría seguir escribiendo más que nada, ahora mismo para otras personas, porque me parece que mis días en una banda han acabado", señala
La editorial irlandesa Hot Press Books ha anunciado que lanzará UNA BIOGRAFÍA AUTORIZADA sobre The Cranberries titulado: Why Can’t We? – The Story Of The Cranberries.Totalmente respaldado por The Cranberries y por los herederos de Dolores O’Riordan, Why Can’t We? documenta el extraordinario ascenso de la banda a través de sus éxitos fundamentales como “Linger” “Dreams” y su éxito mundial, “ Zombie “.00:00% BufferedCopiar la url del videoReproducir / PausarSilenciar / Activar sonidoReportar un problemaIdiomaCompartirVidverto PlayerEl próximo libro, que incluye un formato de edición limitada firmado por los miembros de la banda Noel Hogan, Mike Hogan y Fergal Lawler, y en nombre de Dolores O’Riordan, por su madre Eileen acaba de salir en Dublin. .THE CRANBERRIES: EL LIBRO QUE LO CUENTA TODOEL DEBUT DE DONDE SE TOMA EL TÍTULO DEL LIBROEl libro narra e los proyectos paralelos que involucran a la Navidad, hasta su trágico fallecimiento el 15 de enero de 2018 en Londres.Tras el anuncio del libro, Noel Hogan de The Cranberries dijo:“Stuart Clark escribió el primer comunicado de prensa que hicimos, como The Cranberry Saw Us, por lo que será genial ver su nombre en lo que promete ser un golpe absolutamente brillante relato a soplo de la increíble aventura en la que nos embarcamos, hace tantos años. Siempre hemos tenido una relación fantástica con Hot Press, así que creo que los fanáticos realmente disfrutarán revivir todos los momentos positivos, así como la tristeza y el dolor, como se cuenta a través de las páginas de la revista “.THE CRANBERRIES: EL LIBRO QUE LO CUENTA TODOFergal Lawler agrega:“Creo que a los fans les encantará ‘Why Can’t We?’ Stuart Clark y Hot Press estuvieron allí desde el principio con la banda, y Dolores fue una gran entrevistada. Es una manera fantástica de recordarla y de celebrar la música que fue el trabajo de su vida “.