“Entra dinero por todas partesâ€. Estas palabras de Emilio Botín, presidente del Banco Santander, sorprendían a muchos hace unas semanas. Cíésar Alierta, máximo responsable de Telefónica, volvía a defender esta tesis y los datos la corroboraron días despuíés. La inversión extranjera directa en nuestro país se duplicó hasta septiembre al alcanzar los 14.580 millones de euros. ¿Quíé ha cambiado en los últimos meses para que los inversores vuelvan a confiar en España?
En los últimos meses no hay semana en la que no se anuncie la entrada de un inversor extranjero en el mercado español. Los sectores en los que más ventas se han cerrado han sido en el inmobiliario y el financiero. Banco Popular protagoniza una de las últimas operaciones, tras alcanzar un principio de acuerdo con Ví¤rde Partners y Kennedy Wilson para la venta de la gestión de su negocio inmobiliario por 800 millones de euros. La semana pasada fue Santander la entidad que cerró el traspaso de su filial inmobiliaria, Altamira, al fondo estadounidense Apollo. Uno de los movimientos más vistosos fue la entrada de Bill Gates en FCC. El cofundador de Microsoft se convirtió en el segundo accionista del grupo tras adquirir el 6% de su capital. Pero la lista de operaciones va más allá. En el mercado inmobiliario destaca la batalla que están lidiando Blackstone, y Goldman Sachs por hacerse con las mejores gangas del ladrillo español. El fondo de capital riesgo compró 1.860 pisos de VPO en alquiler al Ayuntamiento de Madrid por 125,5 millones de euros. Y el banco norteamericano adquirió 3.000 pisos al Instituto de la Vivienda de Madrid (Ivima) por 201 millones de euros. Estos son sólo algunos ejemplos del interíés suscitado por el mercado español. Fernando Gumuzio, fundador y director de Azora, asegura que “los inversores están adelantando un cambio de tendencia y están tomando posiciones para cuando se confirme la recuperación económica. Son muchos los inversores y empresas que están apostando por Españaâ€. Gumuzio sabe bien de lo que habla. La gestora que capitanea se ha convertido en el socio local de Goldman Sachs en sus últimas operaciones inmobiliarias en España. El presidente de Morgan Stanley en España, Luis Isasi, comparte esta visión: "Antes había miedo a invertir en España y ahora hay miedo de perder la oportunidad de invertir en el país". En definitiva, en poco más de un año, España ha pasado de estar bajo sospecha (con la sombra del rescate sobrevolando el país) a convertirse en un territorio interesante para los inversores. A continuación, un análisis de los factores que han motivado el cambio. Las palabras de Draghi marcaron un antes y un despuíés “El punto de inflexión que aplacó definitivamente las reticencias de los inversores hacia España fueron las declaraciones de Mario Draghi, presidente del banco central europeo, aclarando que el euro iba a permanecer unido, y por tanto España, permanecía en el euroâ€, explica Gumuzio. En este punto están de acuerdo todos los expertos. Silvio Peruzzo, economista de Nomura, asegura que “los signos preliminares de estabilización en los mercados financieros comenzaron despuíés del anuncio del programa OMT del BCE [el plan de compra de bonos]; sin embargo, llevó un tiempo que la mejora del sentimiento económico fuera más amplia y, finalmente, dar cabida a la estabilización del proceso en algunos de los indicadores del ciclo que ya han aparecido desde la primavera de este añoâ€. Primeros indicios positivos Peruzzo considera que “la estabilización de los mercados financieros, especialmente en el mercado de bonos soberanos, y la materialización de la recuperación económica han mejorado notablemente las perspectivas para la economía española y han persuadido a los inversores de que los retornos de inversión en el país podrían ser atractivosâ€. Hay que recordar que la prima de riesgo ha pasado de los 638 puntos, máximo que se alcanzó en julio de 2012, a situarse en el entorno de los 240 puntos en estos momentos. El Ibex tambiíén ha dado un giro: en el verano de 2012 cayó hasta los 5.956 puntos y ahora está alrededor de los 9.700. Además, la economía española por fin dejó atrás la recesión en el tercer trimestre de este año al crecer un 0,1%, despuíés de nueve trimestres de contracción. Para Josíé Luis Martínez Campuzano, estratega de Citi en España, además de los primeros indicios de crecimiento, “la postura más flexible desde el BCE favorece a la zona y esto, a su vez, tiene un mayor efecto positivo relativo de España con respecto al restoâ€. En definitiva, íél cree que España ha pasado de “sobrevendida a sobrecompradaâ€. Estabilidad política y reformas Además, “los inversores valoran el plan de reformas del Gobierno, que en el último par de años fue intenso en comparación con otros países de la llamada periferia de la zona euroâ€, asegura Peruzzo. Martínez Campuzano explica que el mercado ha pasado de considerar sistíémicos todos los riesgos en España a valorar más los factores positivos. “Las reformas desde el Gobierno nos han permitido recuperar competitividad al mismo tiempo que aumentar la flexibilidad económica; el ajuste y restructuración del sector financiero le han convertido en uno de los más sólidos de la zona; y la estabilidad política es fundamental; así como el ajuste en precios de los activosâ€, comenta. Gumuzio tambiíén destaca las reformas efectuadas por el Gobierno que “han empezado a tener efecto como motor una mejora de la competitividad de la economía española y han contribuido en la mejora de la confianzaâ€. Eso sí, recuerda que “las reformas deben de continuar para que la recuperación económica se construya sobre los pilares sólidosâ€. Ajuste de precios Una vez recuperada la confianza, los posibles compradores desean aprovechar las oportunidades del mercado español y buscan gangas que rentabilizar con la recuperación. El economista de Nomura dice que “los precios de los activos han disminuido de forma muy significativa en España durante la crisis y se encuentran en un nivel tan bajo que muchos inversores consideran un buen punto de entrada. Este es el caso tanto para los títulos como para algunos activos inmobiliariosâ€. Gumuzio asegura que “si bien es cierto que los activos están muy devaluados, los inversores tienen la percepción de que España ha sido penalizada en excesoâ€. “Se trata de un país con mucho recorrido, que ofrece un alto potencial y cuenta, entre otras ventajas, con suficiente tamaño y liquidez para aprovechar esta recuperación, unas excelentes infraestructuras y es muy competitivo en cuanto a producción. Sin olvidar que se trata de un mercado importantísimo de casi 50 millones de habitantesâ€, añade el socio director de Azora. Los sectores más atractivos La gestora de capital Azora hace una apuesta clara por el inmobiliario. “Ha sido uno de los más castigados y ha sufrido una gran depreciación de sus activos, y en el que la recuperación será más rápida que en otros muchosâ€, defiende. “Están apareciendo interesantes oportunidades de inversión en activos de gran calidad y activos a precios atractivos, a medida que las compañías reducen endeudamiento poniendo a la venta parte de sus carteras y los bancos reducen su exposición al sector inmobiliario lo cual, entre otras cosas, va a mejorar su capitalización y posibilitar que vuelva a fluir el críéditoâ€, sentencia Gumuzio. Sin embargo, desde Nomura no comparten esta visión. “La situación del mercado de la vivienda está menos clara para nosotrosâ€, explica Peruzzo. Este economista asegura que se mantiene “una significativa fragmentación entre regiones y entre segmentos del mercado y esto requiere un enfoque más selectivo de las inversiones en ese sectorâ€. Para Martínez Campuzano, “resulta evidente que la pequeña y media compañía es un terreno por descubrir. Pero necesitamos más transparencia y hasta mayor tamañoâ€. Además, Peruzzo cree que “todavía hay muchos inversores escíépticos que están en las líneas laterales esperando algo de claridad acerca de la fuerza y la naturaleza de la recuperación de la economía española. Si esta recuperación sigue, más y más inversores decidirán probablemente aumentar su exposición a España a travíés de diferentes clases de activos. Por lo tanto, los bonos y las acciones podrían beneficiarse de esoâ€. Impacto de la inversión en la economía Gumuzio opina que "el inversor internacional juega un papel muy importante debido a que cuenta con mayor liquidez para invertir y tiene posibilidad de comprar los activos inmobiliarios que van a salir a la venta". "A travíés del desapalancamiento de las compañías y del saneamiento de los balances de los bancos volveremos a tener una economía más equilibrada en la que fluya el críédito hacia el sector inmobiliario y hacia los sectores industriales", añade el director de Azora. Para Martínez Campuzano tambiíén es clave que la financiación llegue, sobre todo, a la pequeña y mediana empresa. "Esperemos que todas las medidas de las autoridades, las actuales y las futuras, logren que este dinero financiero se convierta en producción real", asegura. Peruzzo considera que las entradas de capital y la estabilización de las condiciones de financiación en un país siempre son positivos para la economía real. Pero una vez dicho esto, asegura que "España todavía se enfrenta a un difícil entorno de la demanda interna y el camino hacia una recuperación en toda regla y sostenible es probable que lleve aún mucho tiempo".