https://www.facebook.com/photo.php?fbid=558257770918472&set=a.273024789441773.65420.272644896146429&type=1&theaterYA VIMOS LA REFLEXOLOGíA PODAL Y EN MANOS. AHORA REFLEXOLOGíA FACIAL. CADA DíA MíS USADA, NO DEBE SER TOMADA COMO UN SIMPLE MASAJE MíS. LA VISIí“N DE LA DRA. LONE SORENSEN UNA AUTORIDAD MUNDIAL EN LA Tí‰CNICA Y TODOS LOS BENEFICIOS QUE LA TERAPIA NOS BRINDA.
La reflexología facial es un moderno míétodo terapíéutico de estimulación facial realmente muy eficaz y totalmente natural para tratar diversas afecciones, en especial para tratar trastornos y dolores musculo-esquelíéticos, parálisis, regula funciones orgánicas, desequilibrios emocionales y, entre otras cosas, activa la microcirculación sanguínea.
Esta es una alternativa complementaria que tiene su origen en la medicina oriental, y ha sido practicada desde hace ya miles de años. Esta tíécnica es una variante de la ya conocida reflexología podal, con la ventaja de que esta integra los nuevos descubrimientos en neurología.
¿Cómo se lleva a cabo el tratamiento?
El tratamiento se lleva a cabo mediante la presión manual de diversos puntos en distintas zonas de la cara y cráneo, cada uno con una relación específica con el sistema neuromotor y neurovegetativo. La presión tiene la función de estimular y producir la liberación de neurotransmisores y endorfinas que actúan en funcionamiento orgánico endocrino, circulatorio y linfático de todo el organismo, equilibrándolo y estabilizándolo.
El rostro humano posee alrededor de mil doscientas terminaciones nerviosas que están relacionadas con el sistema nervioso central. Estas zonas reflexológicas mantienen una estrecha comunicación con órganos internos y glándulas, así como con el sistema circulatorio y el sistema linfático. Se conectan, además, con los canales energíéticos conocidos como meridianos (nadis) por la medicina china.
Una sesión consiste por lo general en un análisis facial para que el terapeuta se de una idea de cómo se encuentra el paciente. Según la afección se decide el tratamiento. Una sesión dura aproximadamente una hora u hora y media, y suele prolongarse unos 2 o 3 meses, según el caso.
Las sesiones por lo general se imparten una vez a la semana.
La reflexología facial es muy útil para tratar afecciones como:
· Parálisis facial
· Fibromialgia y neuralgias
· Regular el metabolismo
· Epilepsia
· Autismo
· Daños cerebrales
· Desequilibrios emocionales como angustia, ansiedad, depresión, bipolaridad, falta de memoria, insomnio, hiperactividad, trastornos del aprendizaje, falta de concentración, pánico, fatiga mental, dispersión mental, etc.
· Desequilibrios hormonales
· Problemas de postura y de columna
· Esterilidad
· problemas de columna.
· Coordinación motora y simetría muscular
· Tartamudez, dislexia o problemas de lenguaje
Para facilitar el tratamiento, antes de cada sesión se aplica un aceite natural de rosa mosqueta, aceite de oliva u otro extraído en frío. Luego, el terapeuta distinguirá los puntos a tratar y hará una presión suave en aquellas zonas del rostro que así lo requieran, con la intensión de desbloquear energíéticamente los nervios y permitir el libre y adecuado flujo de impulsos nerviosos y de la circulación sanguínea. Un bloqueo se puede sentir cuando se forma un depósito de fibras en el nervio (o punto) que impiden dicha circulación. La secuencia del tratamiento suele seguir 12 pasos: estiramiento de la piel con los dedos suavemente unas siete veces, presionando de manera firme el tejido y deslizando los dedos con cierta presión por encima de la zona a tratar. Cada zona se trabaja entre 1 y 3 minutos, según su extensión.
A continuación se señalan las diferentes zonas en la cara y sus respectivas afecciones a tratar:
· Zona hormonal, la cual esta relacionada con el sistema del aparato circulatorio y disfunciones del lenguaje.
· Zona del pulmón, la cual esta relacionada con trastornos de la piel (dermatitis, ulceras, etc.), alergias, tensiones musculares de los hombros y disfunciones respiratorias.
· Zona del colon, por medio de la cual se estimula el intestino grueso en caso de hemorragia o pólipos nasales.
· Zona del vientre o estómago: esta zona se estimula en caso de problemas de aprendizaje, cervicales o sinusitis.
· Zona del riñón: en caso de disfunciones sexuales o patologías de los órganos sexuales (útero, matriz, ovarios, próstata, testículos, etc.)
· Zona de la vesícula biliar: en casos de problemas de vesícula o afecciones en rodillas o cadera. Tambiíén se estimula cuando el carácter de la persona es iracundo o violento.
· Zona del corazón: cuando hay exceso de transpiración (nerviosismo), daños cerebrales y problemas de nervios faciales.
· Zona dela vejiga: en casos de problemas de oídos, columna vertebral y cuando la persona padece fobias, miedos, tensiones, temores, etc.
Los resultados se pueden ver rápidamente, sobre todo en el aspecto mental y emocional porque se logra equilibrar de forma asombrosa el sistema nervioso.
¿Es una terapia para todas las edades?
Esta terapia es muy efectiva para tratar tanto a niños como a adultos y personas de cualquier edad, va muy bien con cualquier tratamiento simultáneo, sin embargo, es diferente la forma en que se trabaja con un niño que con un adulto, y tambiíén la terapia puede variar según el tiempo transcurrido en caso de lesiones cerebrales. sus efectos pueden acentuarse con una dieta adecuada.
Daños cerebrales y niños
En este caso, lo mejor es empezar a tratarse cuanto antes. Un daño cerebral por lo general es difícil de curar, pero sin duda se puede mejorar mucho la calidad de vida de un niño, ya que los niños pueden hacer mucho más cosas por si mismos. La doctora Lone Sorensen, creadora del Míétodo de Reflexología facial, ha trabajado con niños con síndrome de Down logrando en niños sin reacción a la estimulación un estado autónomo en el que pueden participar más activamente en su entorno, incluso aprender nuevas cosas. Ha habido casos muy interesantes como el de una niña que nación con insuficiencia en el hígado y llegó en estado vegetativo. Tras poco más de un año de tratamiento la pequeña podía ir por si sola al baño, montar a caballo, reírse, sentarse y hacer sonidos.
LA VISIí“N DE LONE SORENSEN EN EXPO-MASAJE
La piel es el órgano del cuerpo que recibe más agresiones, tanto internas como externas. Su envejecimiento es cronológico e irreversible, pero se puede controlar la agresión y las influencias externas e internas, factores ambientales como consumo excesivo de hidratos de carbono y grasas, exposición a la luz solar, malas costumbres como la falta de horas de sueño, el estríés físico y mental, consumo de tóxicos como cafíé, alcohol y tabaco, son los mayores agresores de la cara dónde se manifiestan visualmente al máximo los efectos, pero anteriormente y de forma progresiva a la manifestación en la cara, las mismas agresiones inician un proceso que causa disminución funcional. Comienza todo un proceso de debilidad interna y como segunda consecuencia, debilidades externas.
La piel se rompe, dando lugar a la flacidez, arrugas profundas y superficiales, disminución de colágeno y elastina, etc.
La reflexología facial es un míétodo terapíéutico, moderno y eficaz. Estimulando manualmente y con láser, es posible compensar las influencias externas y las diferencias biológicas de la cara, pero a la vez en la misma terapia, se influye a travíés de puntos y zonas reflejas de la cara, sobre el funcionamiento orgánico y circulatorio, y sistema linfático, regulando el equilibrio que integra todo el cuerpo.
La reflexología facial tambiíén puede ayudar a síntomas emocionales como angustia, fatiga mental, falta de memoria, insomnio, etc., los cuales son tambiíén causa de huellas en el rostro.
Efectivamente la reflexología facial se puede aplicar como tratamiento preventivo integral, pero a la vez tambiíén como tratamiento postquirúrgico, regulando el proceso constituyente de heridas e influencias orgánicas producidas por la misma intervención quirúrgica o anestesia.
Es una tíécnica muy natural, sin factores tóxicos, muy relajante, que ayudará a mantener la piel tersa y joven actuando en el mismo momento en la integridad de nuestra mente y nuestro cuerpo.
La reflexología podal-facial es una terapia auxiliar y que en realidad tiene base en la Antigua medicina oriental, más tarde investigada y modificada por míédicos europeos y estadounidenses.
La reflexología se practica en una etapa por medio de trabajos zonales básicos, investigando minuciosamente en los pies o en el rostro signos y condiciones diagnósticas propias de cada paciente.
Continuamente se efectúa una estimulación del sistema neurobiológico y sistema nervioso central, a travíés de puntos claves, a lo largo de líneas, denominadas meridianos, y a travíés de zonas, estimulando el torrente sanguíneo como efecto primario se produce una relajación profunda de tensiones musculares y asimismo se ejerce sobre todo el sistema nervioso.
Durante los últimos años en varios centros de investigación de países escandinavos, se ha podido establecer una analogía entre el efecto estimulatorio de esta tíécnica, que a priori supone una acción indirecta y lejana, con fundamentos tomados del estudio del desarrollo del embrión, en sus primeras estadías.
Centrándose en el desarrollo y posterior evolución de las capas embrionarias, se ha prestado especial interíés en la relación embrionaria del ectodermo y sus tejidos derivados, por lo que el sistema nervioso central y la piel adquieren una relación intrínseca y sumamente estrecha, como es bien sabido. Por lo tanto existiría en la vida adulta un efecto cutáneo-nervioso logrado por la estimulación manual, en puntos y zonas específicas y a partir de íéste y la formación reticular se transmitieron otros segmentos del sistema nervioso perifíérico y vegetativo, alcanzándose de íésta forma segmentos corporales más alejados, con respecto al punto de estimulación inicial.
La incidencia refleja piel-SNC, implica un estímulo más profundo que por medio del sistema nervioso perifíérico y sistema nervioso vegetativo alcanza músculos esquelíéticos, articulaciones, huesos, etc. y órganos y vísceras.
De esta forma una presión particular en zonas y puntos específicos puede incidir en el sistema neuromotor y neurovegetativo de una forma muy particular que queda evidenciado por la liberación de neurotransmisores y endorfinas, cuyos aumentos son cuantificados bioquímicamente.
La estimulación conseguida mediante esta tíécnica resulta altamente específica y por lo tanto se han podido conseguir importantes resultados en el campo experimental y luego aplicarlo a un grupo de control.
Por otra parte se le debe añadir el efecto armonizador que acompaña a la misma, por lo que tambiíén es considerada como excelente míétodo preventivo, dado que pueden detectarse con cierta precocidad signos alterados en puntos y zonas reflejas de los pies, lo cuál da una pauta al terapeuta de los sistemas que padecen disfunciones, por lo que no es necesario que se presente la patología específica para comenzar un tratamiento en particular.
En la sociedad actual cada vez existe un número mayor de alteraciones y patologías de etiología desconocida o no precisada aún, sin embargo pueden incluirse como posibles causantes el stríés, agotamiento, ansiedad, angustia, frustración etc.
Por todo esto, una estimulación dirigida a todo el sistema nervioso en general logra un efecto sedante profundo que se mantiene por un tiempo prolongado, incremenáandose proporcionalmente a medida que transcurre el número de sesiones.
Asimismo se comprende que no es necesario padecer de una patología en particular.
Personas que gozan de buena salud física encuentran en esta terapia un excelente aliado para paliar las consecuencias de la sociedad actual.
No existen límites con respecto a la edad de las personas que pueden recibir los beníéficos resultados de esta terapia. Tanto niños pequeños como ancianos pueden ser tratados, observando el control adecuado por el profesional responsable.
La reflexología responde a los dolores músculo-esquelíéticos, como la bursitis, artrosis, fribrosis, espasmos musculares reflejos, causados por traumatismos, tambiíén responde muy bien a los dolores cólicos (rena-biliar) en las cefaleas según la etiología coadyuvante, tiene un efecto biofeedback, de forma tal que los pacientes aprenden a controlar en forma voluntaria los dolores y tensiones musculares. Se ha demostrado que actúa en el dolor de origen psicógeno y funcional, es un tratamiento holístico que actúa en general sobre todo el cuerpo, regula el metabolismo, el trabajo orgánico, simetría muscular y activa la microcirculación.
La tíécnica realizada por personal idóneo puede resultar muy útil, tambiíén indicada para el tratamiento sintomático del dolor postoperatorio, dolor durante el proceso del parto, dolor postraumático localizado (lesiones de deporte), etc.