Por... Masiel Fernández Bolaños
Noticias poco alentadoras sobre el desempeño de la economía alemana en los últimos meses captaron hoy la atención de los analistas e inversores debido a la persistencia de dificultades en la Eurozona.
Los pedidos a la industria de la llamada locomotora europea registraron en octubre su mayor descenso en casi un año a causa de una menor demanda de bienes de capital, reportó el Ministerio de Economía.
El indicador retrocedió 2,2 por ciento al anotar caídas en los pedidos externos e internos.
Por su parte, la Oficina Federal de Estadísticas comunicó que las exportaciones continuaron bajando en el tercer trimestre del año.
Las ventas al exterior mermaron 0,8 por ciento hasta los 272 mil 600 millones de euros.
La entidad añadió que de enero a septiembre, tambiíén se orientaron a la baja.
Sin embargo, algunos expertos opinaron muchos de estos datos han presentado altibajos en los meses recientes, por lo que las señales pudieran parecer un poco confusas.
Entretanto, el banco central alemán, Bubdesbank, pronosticó que la economía crecerá 0,5 por ciento en 2013 y 1,7 en 2014, con lo cual sus estimaciones están en línea con las del gobierno.
Según expertos, la elevación de estos pronósticos evidencia la divergencia creciente entre los países miembros de la Eurozona, una situación que en los últimos años llevó a Alemania a redireccionar parte de su comercio exterior hacia otros mercados fuera del bloque por la insuficiente demanda.