El Tesoro Público ha completado la antepenúltima subasta de deuda del año. El organismo ha conseguido recaudar 4.540 millones de euros en letras, por encima del máximo previsto, pero lo ha hecho a costa de pagar unos intereses más elevados. De media, se han encarecido alrededor del 35%.
Por una parte, ha colocado 1.690 millones de euros en letras con vencimiento a seis meses, por los que ha pagado un interíés medio del 0,686%, un 38% más que en la emisión del pasado 19 de noviembre.
Además, ha adjudicado otros 2.850 millones de euros en papeles a un año. En este caso, la rentabilidad media exigida ha ascendido al 0,883%, desde el 0,678% que abonó el mes pasado.
La demanda ha sido desigual. Para la emisión de letras a menor plazo, las peticiones de los inversores han superado en 2,9 veces lo vendido por el Tesoro, lo que supone un ratio de cobertura muy inferior al del 19 de noviembre bastante menos (5,3 veces). Para los títulos a 12 meses, la demanda ha superado en 2,6 veces lo emitido, mejor que en la anterior subasta similar.
Aunque el Tesoro ya ha cubierto la totalidad de su objetivo de emisión a medio y largo plazo para 2013, que se había fijado en 121.300 millones de euros, ha mantenido el calendario de emisiones previstas y tras la de este martes, volverá a los mercados el día 17 de diciembre, con una subasta de letras a 3 y 9 meses, y el día 19, con una emisión de bonos y obligaciones con la que cerrará el año.