Por... Lourdes Píérez Navarro
Los inventarios de petróleo en Estados Unidos bajaron la semana concluida el 7 de diciembre en 10 millones 600 mil barriles y totalizaron 375 millones 200 mil, informó el Departamento de Energía.
De acuerdo con la entidad gubernamental, esto se debió, esencialmente, a que las refinerías procesaron destilados en cantidades ríécord, almacenaron gasolina e importaron menos petróleo.
La contracción de 2,7 por ciento contradijo las previsiones de los expertos, que esperaban un aumento de dos millones 800 mil barriles.
Aún así, la agencia aseguró que las existencias de crudo están por encima del promedio para esta íépoca y son 2,6 por ciento superiores a las de un año atrás.
Por su parte, las reservas de gasolina tuvieron un alza de seis millones 700 mil barriles, hasta 219 millones 100 mil, el mayor incremento desde enero, incluyendo un aumento de tres millones de toneles en la costa este de Estados Unidos.
Los inventarios de destilados subieron cuatro millones 500 mil barriles, hasta ubicarse en 118 millones, más de los 900 mil esperados por el mercado.
Según el reporte los ingresos de petróleo a las refinerías estadounidenses alcanzaron 16 millones 100 mil barriles diarios, cota más alta para esta íépoca del año.
Añadió que las refinerías petroleras operaron en ese período al 92,6 por ciento de su capacidad, más que el 88,8 por ciento de la semana previa.
Incluida la Reserva Estratíégica, las reservas de crudo y productos refinados en el país norteamericano acumularon mil 781 millones 700 mil barriles, frente a los mil 785 millones 600 mil registrados en la semana anterior.
