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Los brasileños destinaron el 35,85 por ciento de su renta al pago de impuestos en 2012, lo cual representó un alza con respecto a 2011, revela una pesquisa de la Administración Federal de Gravámenes.
La recaudación alcanzó los mil 57 millones de reales (unos 600 millones de dólares) y significó un crecimiento de 2,44 por ciento para el gobierno federal, administraciones regionales y municipales.
Este ascenso ocurrió a pesar de las exenciones fiscales concedidas a fabricantes de vehículos y los electrodomíésticos de la denominada línea blanca (cocinas, refrigeradores y lavadoras) para facilitar el consumo y el movimiento de la economía.
Según fuentes oficiales, los ciudadanos de este país son los que más gravámenes pagan entre los de las naciones emergentes.
A modo de ejemplo, los rusos destinan el 23 por ciento de su renta a saldar tributos, lo chinos el 20, los sudafricanos el 18 y los indios el 13.