EFE
La empresa President Energy anunció hoy que consiguió una autorización del Estado paraguayo para realizar perforaciones en un área de 18.507 kilómetros cuadrados de la región del Chaco en busca de gas natural.
Según un comunicado de la compañía, President Energy, con sede en Londres, invertirá 17 millones de dólares en las operaciones en esa zona, incluida la perforación de un pozo, durante los tres años de la fase de exploración.
President Energy operará los trabajos en asociación con la empresa paraguaya Hidrocarburos Chaco S.A. en una zona "prometedora", según el presidente de la compañía, Peter Levine.
Según Levine, su empresa tiene un "significativo nivel de conocimiento" del área por sus trabajos previos en las concesiones ya obtenidas de Pirity y Damattei, contiguas a la nueva zona de exploración.
La prospección petrolera se realizará en el bloque Hernandarias, que según President Energy cuenta con las mismas características geológicas ya vistas en la vecina cordillera andina en Bolivia y Argentina, donde se han encontrado unas reservas de gas aproximadas equivalentes a 14 millones de barriles de petróleo.
Desde el año pasado, President Energy ha realizado un estudio sísmico con una inversión de unos 30 millones de dólares para determinar dónde excavar los tres pozos previstos para el año que viene en sus áreas de operaciones en Paraguay.
La perforación se realizará "a partir de marzo", según el director de Hidrocarburos del Ministerio de Obras Públicas, Narciso Cubas.
La compañía pretende invertir hasta 100 millones de dólares entre el estudio y las primeras perforaciones, que servirán para confirmar o desmentir las estimaciones hechas hasta la fecha.
Según Cubas, en Paraguay existen ya 49 pozos petrolíferos, de los que 43 se encuentran en la región del Chaco, aunque ninguno produce crudo porque aunque "se han encontrado indicios, las empresas no avanzan porque no les parece una cantidad suficiente" para hacer rentable la extracción.
El Chaco es una vasta región semidesíértica y poco poblada que ocupa la mitad norte de Paraguay. Una disputa fronteriza por sus límites provocó una guerra contra la vecina Bolivia en la díécada de los años 30 del siglo pasado.
Paraguay busca desde hace años petróleo en esa región, ya que tiene una total dependencia de las importaciones de derivados de crudo y de gas. Todos los combustibles que utiliza proceden de Brasil, Argentina y Venezuela.