http://lamaflix.blogspot.com.es/2013/07/la-realidad-programada-3.html LA REALIDAD PROGRAMADA 3
El libre albedrío es la condición fundamental de nuestra realidad, misma que ha sido generada por el creador como un mecanismo para la cristalización de este potencial. Sin la condición de libre albedrío, dios ya estaría autorealizado y completo y no habría ninguna razón para que existiera la presente realidad.
En razón de que la realidad se manifiesta aquí y ahora, y por cuanto sabemos por observación que aún estamos evolucionando espiritual y físicamente, indicando que la experiencia y la creación son el propósito de la vida y que dios aun no está completamente autorealizado, es evidente que poseemos libre albedrío, y que como consecuencia de esto, el mal existe.
¿Cuál es la finalidad de la jerarquía demoníaca supramundana, cuando sus miembros saben que son seres de tercer orden?
Se trata de criaturas celosas, envidiosas inclusive de nuestro limitado poder para crear y modificar la realidad, e imbuidos de un sentimiento de odio hacia la fuente originaria a la que anhelan subyugar y remplazar. Su meta no es la de eliminarnos, porque somos su fuente de energía, sino más bien esclavizarnos y someternos a un continuo y agonizante sufrimiento emocional.
Esperan convertirse en nuestros amos espirituales a travíés del parasitismo espiritual.
¿Cuál es la mejor manera de establecer este parasitismo espiritual? Aquí es donde interviene la nueva matriz.
Recordemos que el propósito de la matriz original era el dotarnos de la suficiente inercia como para poder llegar a una valoración adecuada de nuestra capacidad de libre albedrío y nuestros poderes. Nos permitiría alcanzar la gloria a travíés de superar el sufrimiento.
Las matrices son las responsables por la manera en que vemos la realidad, y por las reglas físicas y metafísicas por las cuales vivimos nuestras vidas. Son un poderoso simulador en todo el sentido de la palabra.
¿Quíé sucedería si una nueva matriz es insertada o superpuesta con el propósito de entorpecer nuestra evolución y facilitar la de los seres de tercer orden? ¿Podría ser acaso que la nueva matriz, en lugar de ser una escuela como la anterior, sea más bien una especie de granja?
Ese parece ser el caso.
Sí, la matriz original diseñada para la acumulación de sabiduría aún existe, pero un nuevo programa ha sido cargado encima de la antigua subestructura para operar con una finalidad diferente. La nueva matriz es un mecanismo altamente eficiente, diseñado para drenar un máximo de energía emocional de los seres atrapados dentro de ella mediante la creación constante de infortunios y melodramas.
Su poder autocorrectivo puede evidenciarse al observar la serie de desafortunadas sincronicidades que surgen en su vida cuando intenta sacudirse su influencia permisiva de encima. La nueva matriz tambiíén se vuelve evidente cuando usted se detiene a observar el comportamiento irracional de la gente en su entorno que ha sido emocionalmente manipulada para generar más energía negativa.
No obstante, el caso no es tan sencillo.
La matriz no es la única cosa que ha sido secuestrada o alterada. Nuestra estructura geníética tambiíén ha sido alterada como consecuencia de las acciones de los seres de tercer grado, si bien esto ha sido conseguido de una manera indirecta. Veamos, los seres de tercer grado no tienen el poder de violar nuestro libre albedrío de manera directa, así como los seres de primer orden no tienen el poder de subyugar a dios.
Las formas de pensamiento, no obstante sí pueden interferir en nuestras vidas de manera indirecta. Por ejemplo, ellas pueden enviarnos ráfagas de energía emocional para nublar nuestro discernimiento y hacer que cometamos errores de juicio. Pueden acosarnos, infestarnos como una plaga, tentarnos, pero no pueden matarnos directamente.
Solamente los seres de segundo orden pueden hacer esto último.
Así que, ¿quíé haríamos si nos damos cuenta de que pueden tentar a un ser de segundo orden para que lleve a cabo un crimen en contra de otro ser de segundo orden? Esa es justamente la manera en que consiguen sus cometidos.
Por ejemplo, sabemos por ciertos reportes de las facciones draconianas (alienígena reptiliano) que si bien estas son responsables de miles de mutilaciones cada año, así como de otros incontables horrores, estos alienígenas en realidad se encuentran poseídos o manipulados por demonios astrales.
Inclusive los seres humanos, desde los asesinos en serie hasta los maridos abusadores de sus esposas, son en alguna medida víctimas de las oscuras manipulaciones de incontables seres demoníacos. Cualquiera que conozca la historia oculta de Adolfo Hitler puede dar fe de esto.
Los grupos cristianos que están actualmente clamando a los cuatro vientos que los visitantes alienígenas son en realidad demonios, tienen parcialmente la razón. La jerarquía de la conspiración alienígena se extiende en dirección vertical hasta los reinos metafísicos y astrales, donde residen las formas de pensamiento oscuras.
Por lógica inferimos que, efectivamente, Lucifer existe. Entre los seres de segundo orden se incluyen no solamente seres humanos, sino tambiíén muchas razas alienígenas, incluyendo a la raza draconiana.
De tal manera, estas razas tambiíén son susceptibles a la manipulación demoníaca. Entonces Lucifer y sus subordinados son, en tíérminos generales, astrales en cuanto a su composición, pero en su capacidad de poseer y manipular a los seres físicos está el origen de nuestras experiencias negativas en manos de alienígenas de orientación negativa, tales como los “grises†y las facciones draconianas.
Como seres de segundo orden, somos en realidad gigantes espirituales comparados con los seres de tercer orden. Pero como se aprende cuando se practica el judo, la manera de tumbar a un oponente más grande consiste en utilizar la inercia de su propio peso en contra suya. Todas las debilidades derivadas de la sobrevaloración de nuestro ego, tales como nuestra adicción al poder, las emociones y la supervivencia a cualquier costa, forman la mayor parte de nuestro peso muerto.
Debido a disposiciones geníéticas, estamos siempre dispuestos a matar para no ser heridos o muertos, de la misma manera que estamos siempre dispuestos a sacrificar el bien de otros por nuestro propio beneficio.
Así entonces los seres de tercer orden astutamente explotan estas entre otras debilidades nuestras con la finalidad de parapetar los muros de nuestra prisión virtual.
A pesar de los míétodos circunvalatorios e indirectos que se ven forzados a emplear, los seres de tercer orden han hecho un excelente trabajo para domesticarnos y subyugarnos. Han engañado a ciertos humanos y alienígenas y los han convencido de vender a sus propias razas para que se conviertan en virtuales esclavos espirituales.
La desactivación de segmentos enteros de nuestro ADN por obra de las facciones alienígenas negativas acaecida en íépocas inmemoriales, dio al traste con algunas de las capacidades originales de sincronización completa con la red energíética global, convirtiíéndonos en discapacitados en la arena de lo oculto, espiritualmente sordos, ciegos y mudos.
La mayoría de nosotros ni siquiera pueda ver una salida de nuestro predicamento, y nos sentimos desprovistos de la escalera que nos permitiría salvar el muro con tal de que tuviíéramos suficiente fuerza como para levantar nuestra cabeza.
Si en la película The Matrix los humanos son colocados dentro de cámaras hermíéticas antes de ser conectados al programa de realidad virtual, en tiempos remotos nuestra estructura geníética fue alterada para poder conseguir el mismo grado de inmovilización. Hemos sido drogados en un estado de sumisión y conectados a una matriz falsificada de realidad virtual, diseñada con el propósito de mantenernos aplacados y sujetos al mecanismo de extracción de nuestra energía emocional por acción de toda suerte de psicodramas virtuales.
Esta energía es extraída por los seres de tercer orden para su propio consumo.