El Tribunal Supremo ha dado la razón a Jazztel para permitirle seguir usando el naranja como color corporativo despuíés de desestimar la petición de Orange que pedía la exclusividad de uso del color en el sector por ser un elemento distintivo de su marca.
La francesa Orange (naranja en inglíés) registró en la Oficina de Patentes y Marcas dicho color como uno de los elementos distintivos de su marca, algo que recurrió Jazztel al entender que la operadora francesa no debía tener tal exclusividad.
Ahora el Tribunal Supremo ha dado la razón a Jazztel al determinar que el color naranja que Orange "trata de reivindicar como signo distintivo exclusivo de sus productos, no deja de ser uno más de los usuales en el mercado", por lo que el "interíés general" de uso del color va contra la solicitud de restricción que reclamaba el operador francíés, según indica la sentencia, que recoge el diario El País.
Además el tribunal destaca que el uso de este color naranja no está limitado a una forma reconocible, pues el usado por la operadora francesa (Pantone 151) sólo está delimitado por un simple cuadrado "en vez de hacerlo a una forma específica que pueda dotarle de distintividad propia por su configuración especial o singular", algo que según la reclamación de Jazztel "no es reconocible para más del 40% de los usuarios españoles".
