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Los comercios chinos se sumaron el viernes al acuerdo de control de precios que el gobierno argentino suscribió con los grandes de supermercados para combatir la inflación, que según economistas privados alcanzó en 2013 el 28%.
En una primera etapa, el acuerdo involucrará "65 productos de primera necesidad", algunos de ellos con distintas presentaciones por su tamaño y contenido, que se venden en unos 600 comercios regentados por la comunidad china en Buenos Aires y sus alrededores. El acuerdo podrá extenderse despuíés a otros puntos del país, dijo a The Associated Press Miguel íngel Calvete, director de la Federación de Supermercados y Asociaciones Chinas de Argentina.
"Nuestra voluntad es que estíé vigente por un año, pero tendrá revisiones trimestrales porque nuestro sector es muy atomizado donde hay costos como logística que tienen mucha dinámica", dijo Calvete.
El acuerdo se suscribió en una reunión de representantes de la Secretaría de Comercio con los de las cámaras de los supermercados asiáticos. Los productos contemplados son alimentos, bebidas y artículos de higiene y aseo personal y estarán señalados en las góndolas con carteles que indiquen que están dentro del llamado "Acuerdo de precios cuidados".
Yolanda Durán, presidenta de la Cámara Empresarial de Desarrollo Argentino y Países del Sudeste Asiático, dijo en tanto a periodistas que a partir de marzo "se irán agregando más productos". Tambiíén señaló que se busca "negociar con las economías regionales y los productores del interior" para que provean los productos a un menor costo.
Desde el 6 de enero rige un acuerdo de control de precios suscrito entre las autoridades y 10 grandes cadenas de supermercados que involucra 100 productos y 65 empresas proveedoras. Comenzó a funcionar en Buenos Aires y despuíés se empezó a aplicar en otros puntos del país.
Cuando se selló ese acuerdo, el jefe de Gabinete Jorge Capitanich estimó que en promedio la reducción de precios será de 7%.
La inflación es una de las mayores preocupaciones de los argentinos. Los cálculos oficiales del costo de vida, que son menos de la mitad de los de los economistas, han sido cuestionados por el Fondo Monetario Internacional, que considera que están subvalorados. El gobierno tiene previsto poner en funcionamiento en febrero un nuevo esquema de medición de precios a pedido del organismo internacional.
Los acuerdos para mantener congelados los valores de una serie de productos que en 2013 puso en marcha el gobierno no dieron resultado, según asociaciones de consumidores. Calvete dijo que a diferencia de esos convenios, el que rige desde principios de 2014 "está firmado por escrito e implica una permanente revisación de precios e información cruzada" sobre los mismos, además de involucrar a más actores en la cadena comercial, como proveedores y distribuidores.
"Pero sostenemos que un acuerdo de precios sirve para bajar la expectativa inflacionaria pero no resuelve la inflación y pedimos que se trabaje en medidas complementarias a mediano plazo para impulsar la oferta de bienes", advirtió Calvete.
Según el directivo de la cámara de comercios, "en Argentina hay una gran concentración de bienes, sobre todo alimentos, en las empresas multinacionales".