í‰poca de cambios en Grupo Antolín. La familia propietaria del grupo, uno de los mayores fabricantes españoles de componentes, está evaluando la posibilidad de salir a Bolsa o de dar entrada en su capital a un accionista industrial minoritario, según informaron a EXPANSIí“N varias fuentes del mercado.
Además, lanzará en los próximos meses una emisión de bonos por un importe de unos 400 millones de euros, en su primera incursión en los mercados de capitales. Estos movimientos se producen tras el acuerdo, sellado el pasado 16 de noviembre, por el que la familia Antolín compró el 22,8% que no controlaba en el grupo a CaixaBank, Bankia y el Fondo de Garantía de Depósitos. Gracias a esta operación, valorada entre 230 y 270 millones de euros y acometida con recursos propios, los Antolín son los accionistas únicos de la firma. Desarrollo Sin embargo, este acuerdo puede ser el paso previo a una reordenación del capital del grupo. Esta operación se haría con vistas al desarrollo internacional de la compañía, que, con una facturación de 2.672 millones de euros en 2012, ya está presente en 25 países y da trabajo a 14.300 personas. El grupo español no quiso confirmar estos planes. «No comentamos rumores del mercado», señalaron desde la compañía. Sin embargo, según pudo saber este diario, el grupo ya ha sondeado varias firmas de inversión y de asesoramiento para estudiar dos opciones: salir a Bolsa o dar entrada al capital a uno o más accionistas minoritarios, probablemente de carácter industrial. Las mismas fuentes matizan que, «en este momento, se trata sólo de planteamientos», cuya ejecución podría tener lugar a «medio plazo». Además, si bien la compañía está evaluando todas las opciones, «no tiene prisa para abrir su capital a terceros». Uno de los asesores de Grupo Antolín en esta fase de evaluación es Analistas Financieros Internacionales. La firma presidida por Emilio Ontiveros es un consultor histórico de la compañía burgalesa. La compra del 23% por parte de los Antolín a la banca por una cifra comprendida entre los 230 y los 270 millones de euros supone valorar el 100% de la compañía entre 1.009 millones y 1.184 millones. Por otra parte, la firma española prevíé realizar una emisión de bonos de hasta 400 millones de euros para refinanciar un príéstamo puente del mismo importe que se cerró el pasado 12 de diciembre. Esta operación fue liderada por BBVA, Santander, Bankia, BNP Paribas y CaixaBank y tambiíén participaron Banca March, Espirito Santo, Bankinter y Deutsche Bank. Según fuentes financieras, la emisión de bonos se llevará a cabo como consecuencia de una de las cláusulas del contrato del príéstamo puente. Está previsto que se realice con un plazo de entre cinco y siete años y tomarán parte en la operación las entidades que, a su vez, participaron en el príéstamo puente. Pese a que el cierre de la emisión está previsto a lo largo del primer trimestre de este año, Antolín no tiene prisa, puesto que la duración del príéstamo puente es de un año y, por lo tanto, caducará el 12 de diciembre de 2014. El fabricante de componentes tiene en marcha una intensa política de inversiones, tanto en España, como en el extranjero, con el objetivo de consolidarse como uno de los líderes en el sector auxiliar del automóvil. Así, en los próximos años, la compañía tiene previsto abrir nuevas plantas en EEUU, Marruecos, Rusia y España, entre otros mercados. La planta española se situará en Valencia y abastecerá, sobre todo, la factoría de Ford en Almussafes, que este año ha incrementado su producción en casi un 70% frente a 2012. Antolín prevíé crear unos 100 puestos de trabajo con esta apertura. A estas instalaciones, se sumará otra fábrica de menor tamaño. El plan de crecimiento del grupo en los próximos años podría no ser sólo de carácter orgánico. La compañía burgalesa no descarta realizar adquisiciones en el sector.