Ebro ha comenzado a vender su participación del 9,3 por ciento en Deoleo, lo que supone que descarta definitivamente una fusión entre ambas empresas. La compañía arrocera ha comenzado a desprenderse rápidamente de sus títulos, de hecho, ayer 3 de febrero informó a la CNMV de que su participación se situaba en el 6,7 por ciento, lo que supone que ya se ha desprendido de un 2,6 por ciento, que estaría valorado en alrededor de 15 millones de euros.
La intención de Ebro es vender toda su participación, lo que le aportaría cerca de 53 millones de euros, ya que la capitalización actual de Deoleo se sitúa en los 571 millones.
Las ventas se están realizando mediante una colocación institucional en el mercado, lo que supone que no se produciría conjuntamente con las cajas que quieren tambiíén desprenderse de su participación, que ronda el 30 por ciento, y para la que recibieron muestras de interíés de empresas como Bunge y Carhill.
El pasado viernes, el presidente de Ebro Foods, Antonio Hernández Callejas, máximo responsable de la compañía arrocera, abandonó el órgano de control de Deoleo junto a Josíé Barreiro. El propio presidente de la compañía de aceites dio entrada además en su capital y su consejo a los andaluces de Hojiblanca.
En ambos casos, la dimisión "obedece a motivos profesionales", según se recogía en la nota al respecto, que ahora quedan más claros al iniciarse la salida de la compañía.
Deoleo cerró el año pasado con unas ventas provisionales de 809 millones de euros, según informó el grupo alimentario a la CNMV.
El consejo de la compañía aprobó el presupuesto para 2014, en el que se prevíé unas ventas de 800millones de euros y un crecimiento del ebitda superior al 20 por ciento. El líder mundial en aceite de oliva registró un ebitda provisional de 80 millones de euros. La deuda financiera neta a 31 de diciembre quedó fijada en 472 millones de euros, frente a los 500 millones de euros anunciados y los 624 millones de euros con los que cerró el ejercicio anterior.
La compañía subraya que ha tenido un "notable crecimiento" en la rentabilidad del último cuatrimestre, que le ha permitido compensar parcialmente los malos resultados obtenidos en el primer semestre, "como consecuencia de la volatilidad en el precio de la materia prima".