Duro Felguera se enfrenta a la quiebra de su socio australiano Forge Group en el consorcio que se adjudicó el contrato para la construcción de la planta de proceso de mineral de hierro del proyecto Roy Hill Iron Ore, cuyo importe asciende a 980 millones de euros. Oficialmente, la compañía española, a la que le corresponden 432 millones (el 23% de su cartera), continúa “ejecutando las obras con normalidadâ€.
Sin embargo, Forge ya ha despedido a 1.800 trabajadores, prácticamente toda su plantilla, según prensa local, por lo que las obras en la mina Roy Hill, propiedad de la multimillonaria Gina Rinehart, están en el aire. Un escenario que, con sus diferencias, se suma a los problemas presupuestarios ocurridos en las últimas fechas en el Canal de Panamá, en cuya construcción participa la española Sacyr. Las similitudes surgen porque la oferta económica del consorcio integrado por Duro Felguera y Forge tambiíén generó las acusaciones de los concursantes derrotados al considerar que era excesivamente temeraria (baja).
La empresa asturiana, a travíés de su filial Duro Felguera Australia Pty, y su socio australiano firmaron con Samsung C&T Corporation el pasado mes de agosto el contrato para ejecutar este proyecto, situado en Pilbara, en el noroeste de Australia, y que incluye, además de la planta, la construcción del puerto y el ferrocarril.
El valor total del contrato es de 1.471,5 millones de dólares australianos (unos 980 millones de euros), de los que 641,5 millones de dólares australianos (unos 432 millones de euros) corresponden a la filial de la empresa española. Con esta obra, Duro Felguera logró entrar en el campo de los grandes proyectos de minería en el país austral, donde este sector tiene un alto potencial de crecimiento.
Ahora, Duro Felguera se enfrenta a un periodo de incertidumbre y se desconoce quíé soluciones contempla el contrato entre la compañía española y la australiana para el caso acaecido. Desde la empresa asturiana se remiten a que “los trabajos asignados se siguen ejecutando con normalidad†e inciden en que “se están buscando solucionesâ€. El objetivo es evitar al máximo retrasos en las obras que afecten a la parte de Duro Felguera y, en definitiva, a su cuenta de resultados.
Entre las alternativas que se barajan, según fuentes del mercado, está que Duro Felguera asuma el proyecto completamente, dada la experiencia de la firma en el área de minería, o la entrada de un nuevo socio. Las obras que corresponden a Duro Felguera, de 432 millones, suponen el 23% de su cartera de pedidos total, que supera los 2.000 millones de euros.
En este sentido, la empresa está a la espera de que Sonatrach formalice la firma del contrato para la construcción de una central de ciclo combinado en Argelia, adjudicado el pasado mes de diciembre a Duro Felguera por 544 millones de euros. Está previsto que la firma se realice en los próximos días.