El consejo de administración de ONO someterá a la junta de accionistas del próximo 13 de marzo una modificación estatutaria orientada a facilitar la agrupación de las acciones en que está dividido el capital de la compañía. La operación es clave de cara a la salida a bolsa y multiplicará por diez veces el valor unitario de los títulos, que pasará de 83 cíéntimos a 8,3 euros por cada acción.
El nominal de las acciones que ahora componen el capital de ONO está fuera de contexto y la operadora necesita ajustar su ampliación para facilitar el proceso de colocación en los mercados de valores. El acuerdo del consejo supondrá la conversión de una acción nueva por cada diez antiguas como paso previo para luego fijar el precio de salida a bolsa una vez cerrado el book runner con los potenciales inversores institucionales.
La valoración estimada de ONO se calcula en una horquilla de entre nueve y diez veces el ebitda de la compañía, que supera los 750 millones de euros al cierre de 2013. La empresa ha impulsado su actividad comercial de manera decisiva en el último trimestre del pasado año, gracias al factor diferencial de una oferta de servicios de alta velocidad. La operadora cuenta con 1,9 millones de clientes, de los que casi tres cuartas partes disponen de contratos de banda ancha.
La salida a bolsa se sustentará mediante una ampliación de capital de hasta un máximo de 1.000 millones de euros. Esta oferta pública de suscripción (OPS) irá destinada en exclusiva al mercado institucional y servirá para apuntalar decisivamente la estructura de balance de la compañía, reduciendo de forma drástica el endeudamiento de 3.300 millones de euros.
La operación incorpora de modo simultáneo una oferta pública de venta (OPV) para atender el denominado green-shoe y ofrecer a los actuales accionistas la posibilidad de vender en condiciones de igualdad y de forma proporcional sus participaciones. De esta forma, la OPV no afectará al reparto actual de la estructura accionarial y su importe dependerá finalmente de la demanda y del precio de la colocación.
Nuevos consejeros independientes
La junta general abordará tambiíén un sistema de retribución para empleados y ejecutivos a travíés de acciones, opciones o algún otro mecanismo referenciado al valor bursátil. El consejo quiere que los trabajadores dispongan de alguna ventaja para incorporarse a la masa social de ONO una vez que la compañía empiece a cotizar en bolsa.
El consejo de la operadora de cable recomendará igualmente a la asamblea de accionistas la adaptación del gobierno corporativo a los requerimientos que establece la Comisión Nacional del Mercado de Valores (CNMV). La modificación de los niveles de gobernanza supondrá un reajuste del máximo órgano de gobierno que determinará el número mínimo y máximo de administradores, incluyendo una cuota destacada de consejeros independientes que representen los intereses de los nuevos accionistas en bolsa.