Reuters
A travíés de nuevas tecnologías y avanzados algoritmos, gestores de activos han incrementado la negociación de acciones a travíés de computadoras, mientras que las operaciones realizadas por humanos va a la baja.
Los inversores bursátiles europeos están realizando por primera vez más órdenes a travíés de computadoras que mediante operadores de carne y hueso, en momentos en que las nuevas reglas del mercado llevan a los administradores de dinero a efectuar mejoras tecnológicas y a reducir costos.
Los generalizados cambios regulatorios, diseñados para hacer operaciones de manera más segura y transparente, han afectado a operadores y gestores de activos y han revolucionado la manera en la que ellos interactúan.
Como resultado, el comercio electrónico, hace 30 años reservado a bancos con expertos en tecnología y fondos de cobertura, se ha extendido gradualmente en el sector, en una tendencia que se alista a avanzar rápidamente.
El año pasado, los inversores europeos enviaron el 51 por ciento de sus órdenes a travíés de computadoras directamente conectadas a la bolsa o usando algoritmos, según mostró un estudio de la consultora TABB, mientras que en 2012 el porcentaje era del 46 por ciento.
A los reguladores les gustaría que una mayor parte del comercio de bonos fuera electrónico tambiíén, pero el progreso en ese campo ha ido mucho más despacio.
El estudio de TABB, realizado a 58 gestores de fondos que controlan 14.6 billones de euros en activos, mostró que una mayoría pretendía canalizar una gran parte de sus negocios a travíés de medios electrónicos de "mínimo esfuerzo" que podrían reducir a dos tercios el valor de las operaciones llevadas a cabo por humanos.
Algunos gestores de activos han decidido incrementar proactivamente el comercio electrónico y por lo tanto reducir la cantidad de operadores que utilizan, manteniíéndoles sólo para órdenes de largo proceso o en intercambios en áreas del mercado donde la baja liquidez lo hace más complicado.
Otros fondos, sin embargo, no querrían incrementar el uso del comercio electrónico, pero se habrían visto forzados porque los operadores cierran sus servicios a clientes más pequeños y se concentran en aquellos que canalizan más negocios a travíés de ellos, dijo TABB.