Telefónica vuelve al mercado. La operadora ha puesto en marcha una nueva emisión de deuda híbrida, que podría rondar los 1.500 millones de euros, según señalan fuentes del sector.
La colocación se haría en dos tramos, uno con un tipo de interíés del 5.125% y otro al 6,25%, según Bloomberg. BBVA, Barclays, CaixaBank, Goldman Sachs, Mizuho, RBS y Santander serán las entidades colocadoras.
La agencia Fitch ha asignado un rating a estas emisiones perpetuas de BBB-, dos escalones por debajo del rating de la propia operadora.
Con estos movimientos, Telefónica sigue con su estrategia de captar nuevos recursos para refinanciar deuda y alargar los plazos de amortización. No es la primera vez que la operadora recurre a este tipo de productos. De hecho, en otoño pasado emitió bonos híbridos por 1.750 millones de euros, destinados a financiar la compra de E-Plus, la filial alemana de KPN.