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Cerca de un millar de personas, vestidas de negro, demandaron el abandono de un proyecto de prospecciones petroleras en el mar Mediterráneo, cerca de las Islas Baleares, España.
La protesta, realizada a lo largo de la playa de Palma, es parte de un movimiento que critica la utilización de pruebas acústicas por considerarlas dañinas para los animales marinos y el peligro que consideran representa para el medio ambiente.
El color negro predominante en la demostración alude tambiíén a la marea negra que pudiera provocar un derrame de petróleo y su afectación al turismo, uno de los pilares de la economía de las islas.
Representantes de la plataforma ciudadana Baleares Diu No adelantaron la posibilidad de presentar una queja ante la Comisión Europea, por considerar que el proyecto viola normativas europeas.
Asimismo alertan que el Mediterráneo es un ecosistema cerrado y pequeño y cualquier problema puede afectar a toda la cuenca.
