Las previsiones del mercado apuntan a una caída del resultado trimestral de Caixabank que debería superar el 20%, aunque se espera una mejora de los ingresos.
De acuerdo con las estimaciones de consenso recopiladas por FactSet, CaixaBank habría ganado de enero a marzo 259 millones, lo que supondría un descenso próximo al 22% frente al mismo periodo del año anterior. Las previsiones de Bloomberg son más pesimistas, indicando que las ganancias habrían caído hasta los 180,5 millones.
El anterior ejercicio, CaixaBank se benefició en sus cuentas de algunos resultados atípicos, y del efecto de la realización de los activos fiscales diferidos (DTA). Este año los extraordinarios serán menores, según destacan los expertos. Aunque, el banco que preside Isidro Fainíé se apuntará unas plusvalías de 45 millones por la venta de su 5% de BME.
Los ingresos totales de la entidad catalana podrían mejorar hasta los 2.276 millones, gracias a la mejora de las comisiones y de los resultados por operaciones financieras (ROF). Sin embargo, el margen de interíés, que recoge los resultados de la actividad bancaria más típica, seguirá cayendo en la comparativa intertrimestral, por la díébil actividad, según apuntan los analistas de Renta 4.
Esta firma estima que la morosidad de CaixaBank apenas ha repuntado en el primer trimestre, subiendo hasta el 11,9% desde el 11,66% del cierre del pasado año.
CaixaBank tambiíén celebra hoy su Asamblea de Accionistas en la que, entre otros asuntos, se nombrará a Amparo Moraleda como consejera independiente.