Las ventas de Loterías y Apuestas del Estado (LAE) empiezan a dar señales de recuperación. Al cierre del primer trimestre, las ventas por terminal, que engloban juegos como la Primitiva, Bonoloto, Euromillones o la Quiniela, registran un avance del 2,89%, una subida que contrasta con los recortes de los últimos años y sobre todo con el dato de 2013, cuando esta facturación registró una caída del 8,13%.
A las ventas por terminal hay que sumar las que genera la lotería nacional, y que tiene en estos tres primeros meses el segundo sorteo más importante del año tras el de Navidad, el Sorteo Extraordinario de El Niño. La facturación de este producto registró una caída del 3,39%, muy inferior al retroceso del 13% del ejercicio anterior, cuando se estrenó el impuesto del 20% sobre los premios mayores de 2.500 euros de las loterías de ámbito nacional.
El peso del primer sorteo celebrado en 2014 sobre la facturación de lotería nacional del trimestre hace que las ventas totales de la LAE se contraigan tímidamente, a pesar del avance de la facturación por terminal.
Cambio de tendencia
Esta bajada, algo menor del 1%, es tambiíén la más modesta de los últimos tiempos y acaba con un periodo en el que se acentuaba la contracción. En 2013, el año terminó con un recorte del 7,9%, lo que suponía casi duplicar las del ejercicio anterior, cuando se registró una caída del 4,8%.
La reactivación de la facturación que se percibe ahora vino precedida de cierta estabilización durante la última parte del año pasado. Durante la primera mitad, y según los expertos, a la crisis económica, que hace que el jugador disminuya la cuantía de su apuesta, se unió el malestar por la implantación del impuesto. Estos dos factores, unido en mucha menor medida a la competencia de los juegos online, explican que las ventas de la LAE llegaran a caer alrededor de un 10%.
Sin embargo, en el último trimestre de 2013 se produce cierta estabilización en las ventas y, así, el Sorteo Extraordinario de Navidad, que supone aproximadamente un 27% de la facturación total de la LAE, cae un 4,1%, la mitad que el año anterior.
Desde la LAE se indica que todavía es pronto para atribuir la evolución de 2014 a una subida del consumo. La progresiva mejora, apunta, se debe a la modificación de algunos juegos, como la Primitiva, que empezaron a dar sus frutos meses despuíés de su implantación, aunque tambiíén puede ser ayudado de una leve mejora del clima económico.
La modificación de la Primitiva a finales de 2012, según LAE, supuso pasar de un recorte del 14% en febrero del año pasado a devolverlo a crecimientos positivos a finales de 2013.
Tambiíén se afirma desde Loterías que hay otros juegos que no están funcionando como quisieran, por lo que se estudia introducir cambios con el objetivo de revitalizarlos y aumentar sus ventas. Este es el caso de la Lotería Nacional y de la Quiniela.
Según declaró la presidenta de la LAE, Inmaculada García Martínez, a la revista de Anapal (Agrupación Nacional de Asociaciones Provinciales de Administradores de Loterías) se encargará un estudio de mercado para conocer la posible viabilidad económica de algunas operaciones, como la introducción de la Apuesta Cotizada (poder apostar a goles sobre un partido) para que la Quiniela vuelva a tener premios millonarios. Según García, íéste el juego que más preocupa, ya que es en el que más han caído las ventas.
Ganancia de cuota
La crisis económica golpeó con fuerza al sector del juego en España, con la única excepción de los juegos online. A pesar del recorte de los últimos años y la irrupción con fuerza de estos competidores, la LAE ha conseguido ganar cuota de mercado durante la crisis.
Según la última Memoria del Juego disponible, la correspondiente a 2012, Loterías y Apuesta del Estado ha pasado de controlar el 31,1% del juego en España a un 36 por ciento. Es una tarta más pequeña, ya que en cinco años, los que van desde 2008, cuando el volumen de negocio alcanzó su máximo, hasta 2012, se pasó de unas ventas de 32.308 millones de euros a 25.988 millones, lo que supone casi un 20% menos.
La ganancia de cuota se hace a expensas de otros juegos presenciales, como casinos y bingos, que son los que menos resistencia han ofrecido a la crisis y cuyas ventas se han desplomado por encima, entre un 35 y un 45%, en 2012.
La Once, junto a la LAE tambiíén ha ganado cuota durante los últimos años, del 6,5 al 7%, por lo que entre las dos organizaciones controlan el 43% de las ventas del sector