La deuda de Martinsa Fadesa a 31 de diciembre de 2013 ascendía a 6.694 millones de euros, según informó la compañía ayer a la CNMV en la presentación de las cuentas del pasado ejercicio.
La inmobiliaria, que se declaró en concurso de acreedores a mediados de 2008 con una deuda de 7.000 millones de euros, y que en 2011 logró apoyos suficientes para firmar un convenio de acreedores y salir de concurso, explica en las cuentas de 2013 que del total de la deuda, 4.103,1 millones es deuda con entidades financieras.
La deuda del grupo presidido por Fernando Martín vinculada al negocio inmobiliario corresponde a deudas concursales con privilegio especial, por 128,3 millones. Tambiíén cuenta con príéstamos hipotecarios subrogables por 210,5 millones de euros.
La inmobiliaria clasifica otros 1.887,7 millones como deuda concursal no corriente. Mantiene deuda por príéstamos con garantía hipotecaria transferidos por entidades financieras a Sareb por importe de 214,2 millones; intereses devengados por príéstamos por 20,5 millones; y deuda concursal ordinaria con acreedores no financieros con vencimiento a corto plazo por 164,4 millones.
Martinsa, que en 2013 registró píérdidas por 710,6 millones, indica que la totalidad “de los príéstamos con garantía hipotecaria mantienen diversas cuotas impagadas por lo que podrían ser exigibles por el correspondiente acreedorâ€.
La compañía negocia reestructurar su deuda para evitar la liquidación. Martinsa Fadesa ha logrado cerrar acuerdos con acreedores que han permitido al grupo mantener la liquidez, pero no pudo atender pagos por críéditos vencidos sin privilegio por valor de 52 millones. Por esta razón el consejo de administración de la inmobiliaria se acogió el pasado mes de enero a una cláusula contemplada en el convenio de acreedores que supone evitar el incumplimiento del mismo y la liquidación.
Los diversos factores que afectan a las cuentas del grupo, con patrimonio negativo, la situación del mercado inmobiliario español y las negociaciones en marcha con la banca acreedora para reestructurar la deuda, han llevado al auditor de las cuentas de Martinsa, Deloitte, a apuntar en su informe de auditoría del ejercicio 2013 de la inmobiliaria la existencia de una "incertidumbre significativa sobre la capacidad de la sociedad para continuar sus operaciones".
El grupo presentó una acción de responsabilidad social contra los anteriores presidentes y consejero delegado de Fadesa, Manuel Jove y Antonio de la Morena, por presuntas irregularidades en la venta de Fadesa a Martinsa –acordada en 2007 por 4.045 millones de euros–, reclamando 1.576 millones de euros. La Audiencia Provincial de La Coruña desestimó la demanda en enero de 2013 y la compañía presentó recurso ante el Tribunal Supremo en febrero del pasado año. El grupo indica en sus cuentas de 2013 que actualmente se tramita en sala de lo Civil sin que "por el momento haya recaído sentencia al respecto".