Prosegur ha cerrado el primer trimestre del año con un beneficio neto de 39 millones de euros, 3 millones más que en el mismo periodo del ejercicio anterior a pesar del impacto de la fuerte depreciación de las divisas en Latinoamíérica, donde concentra gran parte de su negocio.
El resultado de explotación antes de amortizaciones ha caído de 108 a 105 millones de euros, mientras que el beneficio operativo se ha mantenido en 77 millones. En cuanto a los ingresos, han caído un 3,6%, hasta 919 millones de euros.
La compañía ha atribuido el el comportamiento de estas partidas a que "las principales monedas de la zona LatAm han sufrido fuertes depreciaciones a principios de año".
En este sentido, Prosegur ha explicado que, sin tener en cuenta el efecto de los tipos de cambio, el ebitda ha crecido un 24%, el beneficio operativo, un 32%, y los ingresos, un 13%