Por... DAVID McHUGH
FRANKFURT, Alemania -- Se espera que las cifras oficiales a divulgarse el jueves confirmen que la recuperación europea luego de enfrentar la recesión se aceleró en el primer trimestre del año.
Sin embargo, la recuperación está acompañada por tantos temores, que el Banco Central Europeo se prepara para anunciar medidas de estímulo que son más habituales para las economías en recesión que para aquellas al alza.
Las cifras, según se anticipa, deberían mostrar que la economía de los 18 países que usan el euro se expandió 0,4% en los primeros tres meses del 2014 con respecto al trimestre anterior. Eso es el doble de la tasa registrada en el trimestre previo y marcaría la tercera expansión trimestral consecutiva.
La recuperación es claramente una fuente de esperanza para una región que desde el año 2008 ha estado gran parte del tiempo sumergida en la crisis. La crisis financiera mundial, que amenazó el sistema bancario, expuso las debilidades de todo el proyecto del euro: el estado inestable de las finanzas públicas de muchos de los países que utilizan la moneda, como Grecia, Portugal e Italia.
El crecimiento, así sea inestable o desigual, es clave para superar esos problemas.
Algunas de las señales positivas de los últimos tiempos incluyen:
— Cinco meses consecutivos de descensos moderados en el número de personas desempleadas. Hace un año hubo temores de que el desempleo en la eurozona superaría la marca de 20 millones de parados. Ahora ha caído a unos 18,9 millones de desempleados y la tasa se ??ha reducido a 11,8% desde la cifra ríécord de 12%.
— Encuestas a gerentes de compras han apuntado a una recuperación de la confianza entre los ejecutivos de negocios a niveles que indican una expansión sólida.
—El crecimiento boyante en Alemania, la mayor economía de Europa. El país y sus exportadores se han beneficiado enormemente de la recuperación del comercio mundial.
—Algunos signos de recuperación en los países más afectados por los problemas de una abultada deuda. España, que necesitó un príéstamo de rescate de 41.000 millones de euros (56.000 millones de dólares) de otros países de la eurozona para rescatar su sistema bancario, ya ha reportado un crecimiento del 0,4% en el trimestre, su mayor nivel en unos seis años. Y el resultado de Grecia podría haber detenido su caída, aunque su economía es un 25% más pequeña de lo que era en sus máximos de 2008.
Sin embargo, en medio de ese panorama, el presidente del Banco Central Europeo, Mario Draghi, prácticamente prometió más medidas de estímulo cuando el consejo de fijación de tasas del banco se reúna el 5 de junio. Draghi dijo el jueves pasado que el consejo se sentía "cómodo con tomar medidas la próxima vez".