El presidente del Gobierno, Mariano Rajoy, se ha implicado personalmente en la operación de rescate de la empresa estatal Navantia que aprobará mañana el Consejo de Ministros y que está considerada pieza clave electoral en Galicia.
El Gobierno tiene previsto aprobar un presupuesto plurianual de 400 millones de euros para asegurar carga de trabajo y estabilidad en el empleo a Navantia en lo que queda de legislatura y parte de la próxima.
Las estimación es que con esta carga de trabajo, más la arrancada a empresas del Ibex y al grupo mexicano Pemex para que colaboren en el salvamento, proporcionará carga de trabajo y empleo hasta 2017, según aseguran a este diario fuentes gubernamentales. Rajoy resuelve así una situación en la que la alternativa era un rescate en toda regla del Estado con inyección de capital para evitar la quiebra de Navantia, que da empleo a 5.500 personas.
El Consejo de Ministros deberá contratar dos Buques de Acción Marítima (BAM), en el primer pedido de este calibre que se realiza desde 2006. Para ello, tendrá que elevar el techo de gasto del Ministerio de Defensa y un críédito extraordinario del de Industria para financiar la construcción de los dos buques. Uno de ellos será construido en los astilleros públicos de El Ferrol y otro en Cádiz.
El propio presidente de la Xunta de Galicia, Alberto Núñez Feijóo, hizo el anuncio el pasado día 8, horas antes del inicio de la pegada de carteles, y fue corroborado ese mismo día por el presidente de la Sociedad Estatal de Participaciones Industriales (Sepi). Si hubieran aguardado un día más, el anuncio podría haber planteado un problema legal, al hacerse ya dentro de la campaña.
No obstante, el anuncio no concitó la credibilidad deseada y todavía el pasado día 19 delegados sindicales de Navantia impidieron el paso en Ferrol a directivos de la empresa pública «en protesta por la nefasta acción comercial de esta dirección al llevar más de siete años sin ser capaces de lograr un contrato». El ministro de Hacienda, Cristóbal Montoro, ha reaccionado aceptando ya formalizar un primer paso este viernes, al proponer al Consejo de Ministros un programa plurianual de gasto que haga creíble el pedido.
Búsqueda de apoyo de empresas del Ibex
El Gobierno ha ejercido tambiíén influencia en el sector privado para que colabore en dar pedidos a una empresa tan sensible desde el punto de vista electoral y social. Gas Natural se negó el pasado año a contratar a Navantia los cuatro buques gaseros que necesitaba, lo que supuso a la empresa pública perder 600 millones de euros y 12 millones de horas de carga de trabajo no sólo para Navantia, sino para 400 empresas auxiliares en Ferrol, Cádiz y Sestao. Gas Natural -que ha firmado los cuatro buques con astilleros de Corea y, muy recientemente, de Japón- ha terminado aceptando encargar un quinto buque a Navantia, que será construido en Cádiz.
Por su parte, el propio Feijóo preside hoy el inicio de construcción del flotel encargado por Pemex. El grupo estatal mexicano paralizó durante meses el proyecto en protesta por el maltrato que dijo recibir en Repsol como accionista, pero, finalmente, accedió a separar ambos proyectos. El director general de Pemex, Emilio Lozoya, se lo corroboró al ministro de Industria, Josíé Manuel Soria, el pasado enero en Davos (Suiza).
Con todo este cóctel, Navantia se asegura dos grandes pedidos en Ferrol (el BAM para la Armada y el flotel de Pemex) y otros dos en Cádiz (un BAM y el gasero de Gas Natural). El presidente de Iberdrola, Ignacio Galán, dio esperanzas en Moncloa el pasado día 7 de realizar otro importante pedido para Navantia. Fue al asistir, dentro del Consejo Empresarial para la Competitividad, a un almuerzo con el propio Rajoy.
Iberdrola ultima un gran proyecto eólico marino en Alemania que supondría para Navantia la construcción de 75 plataformas y, sobre todo, un estreno de la empresa estatal en esta especialidad.
El presidente de Repsol, Antonio Brufau, tambiíén ha ofrecido construir en España dos buques de transporte de gas licuado, como adelantó este diario. Pero Navantia no tiene previsto participar en su construcción al tratarse de buques de un tamaño excesivamente pequeño. El grupo estatal sí espera redondear su carga de trabajo con las gestiones del Rey en Qatar y Arabia Saudí.
El presidente de Navantia, Juan Manuel Revuelta, recibió el pasado día 12 a una delegación de la Armada de Colombia, interesada en otro BAM