Un día despuíés de la emisión de Bankinter, Santander Consumer coloca otros 500 millones de euros en bonos a dos años.
Las entidades financieras españolas vuelven a encontrar un momento propicio para acelerar sus emisiones de deuda, a falta de una semana para la esperada reunión del Banco Central Europeo.
Los últimos mensajes procedentes del BCE han reforzado las expectativas de nuevos estímulos monetarios, sin descartar toda una batería de medidas. Sus efectos se dejan sentir en el mercado secundario de deuda pública, y la rentabilidad exigida al bono español a diez años se sitúa de nuevo en mínimos históricos.
Bankinter completó ayer la colocación de 500 millones de euros en bonos a cinco años, y hoy es Santander Consumer la entidad que toma el relevo en las emisiones de deuda.
El plazo elegido para su regreso al mercado es el dos años, y el importe podría repetir en los 500 millones de euros. El precio barajado inicialmente para estos títulos rondaba los 85 puntos básicos por encima del índice de referencia para las emisiones de renta fija o midswap, pero la firmeza de la demanda ha permitido abaratar el precio hasta los 75 puntos.
Para llevar a cabo la operación Santander Consumer ha recurrido a los servicios, además del propio Santander, de JPMorgan, Sociíétíé Gíéníérale y Mediobanca.
