Los títulos de Repsol no son los únicos damnificados de la colocación acelerada que ha llevado a cabo Pemex sobre el 7,8% de la petrolera, que se ha realizado de manera acelerada con un descuento del 3,6%.
Sacyr y Caixabank, los dos accionistas de referencia de la petrolera, tambiíén se están viendo arrastrados por la fuga de su hasta ahora socio y aliado, hasta el punto de que lideran, junto a la compañía presidida por Antonio Brufau, los recortes del Ibex 35.
En el caso de la constructora presidida por Manuel Manrique, el recorte es superior al 2%, lo que le ha hecho perder el precio de los cinco euros por acción que había conseguido reconquistar este lunes.
Por su parte, la entidad capitaneada por Isidro Fainíé se deja más de un 1,5%, lo que sitúa el precio de sus títulos en los 4,45 euros.
A pesar de la corrección de hoy, el consenso de analistas de Bloomberg mantiene para Repsol un precio objetivo de 21,16 euros, lo que supone un potencial del 5,27% respecto al precio al que ha llevado a cabo la colocación Pemex.