Por... TOM KRISHER
DETROIT, Michigan, EE.UU. -- Cuando Kenneth Feinberg anuncie los tíérminos del plan de compensación de General Motors a las víctimas de accidentes causados por un interruptor defectuoso llegará con la billetera abierta.
Feinberg, el experto en compensación más conocido de Estados Unidos, debe revelar los tíérminos el lunes, y la directora general de GM, Mary Barra, ha dicho que la cantidad asignada a los pagos no tiene límite.
Además, GM no tendrá poder de decisión sobre las compensaciones que fije Feinberg, declaró a una subcomisión de la Cámara de Representantes federal durante una audiencia anteriormente este mes.
"Tendrá una independencia completa", dijo Barra durante la audiencia. "General Motors quiere llegar con este programa de compensación a todos los que han perdido a un ser querido debido a este asunto, o que han sufrido lesiones físicas serias".
La compañía dice que los interruptores defectuosos son la causa de por lo menos 54 accidentes y más de 13 muertes, pero abogados y legisladores afirman que la cifra pudiera estar más cerca de 100, con cientos de lesiones. Eso pudiera hacer que los pagos ascendieran a millones, quizás miles de millones de dólares.
Al 31 de marzo GM tenía reservas de 27.000 millones de dólares en efectivo y hasta el momento ha anunciado cargos de 2.000 millones para cubrir los gastos de las convocatorias a reparación.
Feinberg, quien tambiíén administró el fondo del gobierno de 7.000 millones de dólares para las 2.977 víctimas de los atentados terroristas del 11 de septiembre del 2001, probablemente siga un plan similar en el caso de GM, con fórmulas detalladas que fijan los pagos sobre la base de la gravedad de las lesiones y la edad.
La compensación promedio a las 2.880 familias que presentaron reclamaciones relacionadas con los ataques del 11 de septiembre fue de 2,1 millones de dólares. El fondo tambiíén pagó un promedio de unos 400.000 dólares por cada una de las 2.680 reclamaciones de lesiones aceptadas. La menor compensación por lesiones fue de 500 dólares y la mayor de 8,6 millones.
La compensación de GM probablemente se limitará a las víctimas de los accidentes de autos pequeños más viejos, de los cuales GM llamó a revisión 2,6 millones anteriormente este año debido a que el interruptor de encendido puede hacer que el motor se apague, lo que desactiva la dirección hidráulica y los frenos asistidos. Eso a su vez puede hacer que los conductores pierdan el control del vehículo y además desactiva las bolsas de aire.
Los vehículos afectados son el Chevrolet Cobalt y el Saturn Ion, que ya no se fabrican.
Feinberg pudiera usar la activación de las bolsas de aire para decidir quiíén recibe compensación. Si las bolsas se desplegaron en un accidente, eso significa que no quedaron desactivadas por los interruptores, por lo que íéstos no estaban defectuosos.
GM ha dicho que Feinberg comenzaría a aceptar reclamaciones el 1 de agosto. Barra dijo que no sabía cuánto tendría que gastar la compañía para cubrir las indemnizaciones.
Para recibir un pago, las víctimas tendrían que aceptar no demandar a GM. La empresa es vulnerable a reclamaciones legales porque ha reconocido que estuvo al tanto del problema del interruptor durante más de un decenio, pero no llamó a revisión los vehículos hasta este año.
Feinberg tiene programada una conferencia de prensa el lunes en Washington para dar a conocer los detalles, tales como cuáles son las personas que cumplen los requisitos para reclamar, "el alcance, reglas del programa y el período para presentar reclamaciones", dijo una portavoz de Feinberg en un correo electrónico. El programa tambiíén lanzará el lunes un portal de internet.