EFE
Daniel Galilea
¿Se puede economizar viajando? Un experto explica cómo ahorrar dinero en comidas, transportes y alojamiento, para poder permitirnos algunos caprichos que son menos accesibles con el turismo tradicional.
“Viajar es una de las mejores fórmulas para conocer otras culturas y modos de pensar y una gran fuente para abrir nuestra mente, pero a veces el inconveniente para practicarla es el dinero que hay invertir en elloâ€, señala Chema González, uno de los fundadores de Alterkeys, (alterkeys.com), portal en línea de alquiler de viviendas como alternativa a los hoteles.
Viajar bien y hacer un turismo de calidad gastando poco es posible, si se aprovecha las herramientas disponibles en Internet y se aplican unas sencillas estrategias de ahorro, según el desarrollador de negocios de esta plataforma digital que “pone en contacto a personas que quieren rentabilizar su propia vivienda con aquellos viajeros que quieren conocer la ciudad de una forma diferente y adecuada a su bolsilloâ€, según explica.
Según González “esta fórmula permite al inquilino economizar y sentirse como en su casa, al alquilar una vivienda directamente a su propietario quien, por su parte, paga una comisión por la operación y tiene cubierta su propiedad por un seguro gratuitoâ€, quien añade que su actual foco de propiedades está en Europa y están extendiendo cada vez más sus fronteras a Amíérica, comenzando por Estados Unidos y Míéxico.
LAS VENTAJAS DEL TURISMO ALTERNATIVO
¿Cuánto puede ahorrar un huíésped utilizando un portal para alquilar una vivienda para uso vacacional a su propietario?
González calcula que el ahorro puede ser de un 70 por ciento en comparación con un alojamiento hotelero tradicional, “no solo por el precio de la estancia por noche, sino porque alojándose en un apartamento no hay que contratar una pensión completa o salir fuera a comer, ya que uno puede cocinar su propia comida, lo que aumenta considerablemente el ahorroâ€.
Además, “en estos apartamentos o casas se dispone de wifi gratuita, evitando las facturas por costes de internet de las compañías telefónicas, sobre todo en viajes internacionales, y puede ahorrarse en lavandería, al tener la comodidad de poder lavar ropa en el propio alojamientoâ€, añade.
“Un ejemplo: con este tipo de alquiler directo a travíés de internet, una estancia de 15 días para 4 personas en el centro de Londres costaría una media de $1,500, mientras que si la misma estancia se realiza en un alojamiento tradicional barato, su gasto más económico no sería inferior a los $3,000â€, señala.
“Si se reservan con antelación suficiente, los hogares registrados en este sistema pueden alquilarse a unos precios más asequibles que los de la oferta hotelera, porque están menos sujetos a los precios estacionalesâ€, asegura el experto de Alterkeys.
DISFRUTAR MUCHO GASTANDO MENOS
· Planifique con antelación. Defina el tipo de viaje y planifique dónde y cómo quiere dormir. Piense en su destino al menos un par de meses antes del viaje y, una vez elegido, no lo deje para mañana: resíérvelo en ese instante. Así podrá beneficiarse de unos precios más reducidos en alojamiento y vuelos.
· ¿Por quíé viajar en temporada altas como Navidades, Semana Santa o verano? Se puede conocer lo mismo sin pagar el doble y sin que los lugares más señalados estíén llenos de visitantes.
· ¿Tiene previsto tomar un avión? Recuerde que volar entre semana le permitirá ahorrar hasta un 75 por ciento si opta por las compañías low cost, ya que su servicio no dista mucho del resto de aerolíneas si viaja en clase turista, y estudie el coste de volar a los aeropuertos secundarios ya que ¡puede salirle más caro!. Comprar sus billetes ‘online’ tambiíén le hará ahorrar.
· Personalice su experiencia. En vez de recurrir a las tradicionales guías de viaje, pruebe un estilo diferente en el que personas de la ciudad o el rincón del mundo que visita, sean las que le cuenten quíé puede hacer y le guíen durante su estancia.
· Si viaja por carretera comparta coche. Elija esta opción siempre que pueda y le apetezca: su bolsillo notará el ahorro y el medioambiente agradecerá la reducción de contaminación. Algunas ‘apps’, así como los consejos de su anfitrión y de la gente del vecindario de la zona donde viaje, pueden serle de gran ayuda.
· Economice con el menú alimentándose bien. Recurrir de vez en cuando a la comida envasada puede ayudar a evitar tener que comer todos los días en un restaurante. Y ¿por quíé no comprar o cocinar una comida típica de lugar o una cena local?
· Estudie el terreno. Durante su estancia en cualquier ciudad, es esencial efectuar un estudio previo al viaje sobre los lugares que visitará y dónde se comerá. Así, sabrá desde antes de su llegada los sitios más y menos económicos, evitando el gasto innecesario en comidas o visitas turísticas.
· Conozca la ciudad que visita desde dentro. Trate con vecinos ¡y más vecinos! creando así un conocimiento autóctono del lugar, mucho más amplio y autíéntico que a lo que estaba acostumbrado con el turismo tradicional. Y todo esto, gratis.
· De vacaciones con la mascota. Las casas de alquiler son grandes soluciones para no dejar en casa a los animales de compañía, si consideramos a nuestro perro, gato o ave, como uno más de la familia y no nos gusta separarnos de ellos.·