Por... Jorge Arenas
Si estas vacaciones has decidido dejar el avión o el tren de lado, y te has decidido por salir fuera de tu país a bordo de tu coche, quizá te interese conocer algunos consejos prácticos acerca de la vida en carreteras extranjeras. A veces, las cosas no son iguales que en casa? Alemania cobrará peaje a conductores extranjeros por usar sus autovías.
- Llevar siempre encima carnet de conducir y DNI. En España o fuera, siempre te lo pueden pedir en cualquier momento. Lo mismo con la documentación completa del coche. ¿Sabes cuánto puntos de carnet te quedan?
El permiso de conducción español es válido en la Unión Europea y en todos aquellos países con los que España tiene firmado un convenio: Andorra, Argelia, Argentina, Bulgaria, Bolivia, Brasil, Colombia, Croacia, Chile, Ecuador, Filipinas, Guatemala, Marruecos, Perú, Paraguay, República Dominicana, San Salvador, Serbia, Turquía, Túnez, Ucrania, Uruguay y Venezuela, además de Islandia, Noruega y Liechtenstein.
- Si vas a conducir por cualquier otro país del mundo, necesitarás el permiso internacional. Para conseguirlo deberás ir a las oficinas de la Dirección General de Tráfico, que lo tramitarán previo pago de un importe cercano a los 10 euros.
- Si el vehículo con el que viajas no es tuyo, no está de más llevar una autorización del dueño. Puede evitar algún que otro malentendido cuando toca dar explicaciones en el extranjero.
- Generalmente los seguros tienen validez fuera de España, sin embargo, las coberturas no tienen por quíé ser las mismas. Consulta con tu compañía hasta dónde llega la cobertura de tu póliza en el país de tu destino.
- Carta verde: no es necesaria dentro de la Unión Europea, aunque sí en otros países. En cualquier caso, facilita la reclamación de indemnizaciones en caso de accidente. Si no se dispone de ella, hay que llevar siempre los documentos que certifiquen que el coche está debidamente asegurado. Tambiíén puedes pedir a la compañía de seguros que te facilite el formulario europeo de parte de accidente, que facilita las cosas cuando nos damos un golpe fuera de nuestro país.
- Las leyes y la normativa de tráfico no son iguales en todos los lados. No está de más echar un vistazo, al menos, a los límites de velocidad y demás normas básicas fijadas en el país al que vamos a viajar para evitar sorpresas. Además, si se comete una infracción lo más probable es que te toque pagar la multa al instante, los agentes no te dejarán ir hasta que no saldes tu deuda.
- Circulación en el centro:
en algunas ciudades europeas para acceder al centro urbano se necesita un adhesivo cuyo precio, por lo general, está relacionado con el nivel de emisiones del vehículo. Puede darse el caso, incluso, de que ciertos vehículos no puedan acceder al casco histórico. La información al respecto suele estar en las webs de las embajadas o de las oficinas de turismo.